Julián Báez Rosas a sus 46 años de edad y con una experticia de 20 años como cantante que se instala en el Pasaje del Ayuntamiento saca fortaleza para enfrentar la pandemia y la vida, debido a que cuenta con una discapacidad, pues tiene parálisis cerebral y actualmente se encuentra en aislamiento por ser positivo del covid-19.
En entrevista con MILENIO Puebla, compartió que desde que nació cuenta con esta enfermedad la cual no ha sido una limitante para desarrollar su aptitud artística pues su sueño de cantar lo desarrolla.
En este contexto, relató que desde niño descubrió el gusto por la música en especial al canto, por ello se dedica profesionalmente y como una fuente de ingresos, pues señaló que lo ha sacado adelante para vivir.
El entrevista narró que desde hace 20 años que se dedica a la música, en la vía pública sin que su discapacidad sea una limitante pues se traslada en silla de ruedas y con una grabadora para interpretar las canciones de todo tipo de género.
Durante la entrevista vía telefónica comentó que, enfrentarse al covid-19 ha sido una situación complicada, debido a que sus ingresos se vieron mermados hasta en un 50 por ciento.
Ante esto, destacó que al principio de la contingencia sanitaria estuvo en confinamiento pues acató las medidas del gobierno del estado, por ello no trabajó por más de cuatro meses hasta que el estado cambió a semáforo amarillo.
El entrevistado precisó que desde hace cinco años que se instala en el Pasaje del Ayuntamiento para realizar su actividad, por lo que los ciudadanos ya lo identifican y el turismo también, esto antes de la pandemia.
Destacó que el canto ha sido una forma de vida y la puerta para llegar a otros ámbitos como es la locución y el periodismo cultural.
“Estoy desde hace 20 años en la calle, el canto me ha dado muchas cosas pues me he desarrollado como locutor y como periodista cultural, por ello no bajó la guardia para ser mejor cada día y la pandemia es una situación muy complicada pero debemos echarle ganas”, expresó el entrevistado.
Ante esto, destacó que como artista urbano y con pandemia vive una situación complicada, no obstante en octubre del 2020 recibió tres mil pesos como apoyo económico de parte del Instituto Municipal de Arte y Cultura (IMAC), pero indicó que estos no son suficientes para sobrevivir por más de 10 meses.
Julián Báez con felicidad compartió que hace dos años decidió formar una familia y que a sus 46 años de edad es padre un menor de 10 meses, que le da fuerzas para seguir adelante y no decaer.
“Me dedico más al Rock pero en la calle debes cantar de todo como ranchero y baleros para que se tengan canciones al gusto de la gente, pero al estar cerrados los comercios pues los ingresos están bajos y actualmente con el segundo confinamiento no salimos a la calle”, puntualizó.
El cantante resaltó que durante la contingencia sanitaria toma las medidas necesarias, por ello se traslada de su casa ubicada en La Margarita en taxi, sin embargo con esta segunda ola y la alerta máxima se contagió del virus, por ello está en aislamiento y con tratamiento para salir de esta enfermedad.
Con toda la fe, expresó que su hijo y su familia son su fortaleza para no decaer, pues subrayó que la vida es maravillosa para no luchar por lo que quiere.
“Tengo un Bebe de 10 meses y eso me motiva seguir adelante con la música y debemos tener la fe bien puesta en lo que somos y hacemos, para que saliendo de esta enfermedad podamos seguir con nuestras vidas, es complicado lo sé pero se puede lograr las cosas, por ello se deben cuidar y cuidarnos, porque estando contagiados es difícil recuperar al cien por ciento la salud”, concluyó el cantante.
AFM