“¡Qué lo crucifiquen! ¡Qué lo crucifiquen!”, se escuchó en la junta auxiliar Ignacio Romero Vargas, al poniente de la capital del estado de Puebla, cuando Poncio Pilato, prefecto de la provincia romana de Judea, preguntó sobre el futuro de Jesús de Nazareth, representado por Lucio Flores Moreno.
La 59 representación de la obra “El Eterno Redentor”, adaptación del médico, Jorge Morales Flores, sobre la pasión de Cristo, con diferentes elementos agregados a los pasajes de la Biblia, se realiza ante la mira de cientos de personas en el llamado campo de la cohetería, a unas calles del centro de junta auxiliar.
Por un momento, la disputa por el usufructo del predio ubicado sobre calle Anáhuac entre Flores Magón y Constitución quedó olvidada y, este Viernes Santo, se puede desarrollar la representación en la que participan más de 600 actores, la mayoría habitantes de la comunidad y familiares de Jorge Morales Flores, quien por más de 50 años representó a Jesús y hoy se mantiene como director de la obra.
De forma previa, el grupo artístico San Pablo de Tarso que encabeza Jorge Morales Flores, llegó a un acuerdo para usar el predio, con permiso autorizado por la presidencia auxiliar para que se pueda realizar la obra que es seguida por cientos de personas y más de dos centenas de puestos de comerciantes que ofrecen alimentos, bebidas y diferentes artículos.
Poco antes del mediodía, la obra comenzó con escenas de Jesús realizando milagros, luego siguieron los 40 días en el desierto y el regreso a Nazareth para realizar su entrada montando un burrito, entre palmas de los actores.
Jesús realizó el lavatorio de pies a sus 12 apóstoles, luego encabezó la escena conocida como “La Última Cena, y más tarde fue traicionado por Judas. De acuerdo con la adaptación de Morales Flores, Jesús fue arrestado tras orar en el huerto de Getsemaní.
Ante vecinos de la propia junta auxiliar, poblanos de diferentes partes del estado y algunos visitantes de otras entidades, Jesús fue interrogado por Anás y juzgado por Caifás, quien determinó que debía ser crucificado. Luego, Jesús es mandado ante Poncio Pilato, quien se “lavó las manos”, y más tarde hizo su aparición Herodes.
Jesús regresó a Poncio Pilato, quien, al cuestionar a los habitantes, libera al delincuente Barrabás. Al final, Jesús es condenado a la cruz.
Durante la tarde de este viernes, Lucio Flores Moreno, quien representa a Jesús de Nazareth, recorrerá tres kilómetros cargando una cruz. El momento cumbre de la representación llegará cuando Jesús muera en la cruz.
La obra seguirá durante la tarde-noche con la Resurrección de Cristo y culminará con el momento en que Jesús subirá al cielo.
MITM