Urgenciólogo del IMSS de Reynosa, es el médico que consulta a pacientes covid a domicilio, después de superar esta enfermedad en carne propia, ha atendido a más de 300 personas, en un proyecto que hoy en día le va dejando vivencias únicas, en una pandemia que se mantiene vigente.
Considera que la voluntad de Dios lo ha hecho instrumento para ayudar a la gente, donde pone en práctica sus conocimientos con enfermos que prefieren sus casas que estar en un hospital, en el temor de morir lejos de sus seres amados.
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Gustavo Gutiérrez, es urgenciólogo con 10 años de experiencia, certificado por el Consejo Mexicano de Medicina de Urgencias y tiene una maestría en docencia.
“Hable con Dios y le dije, si es mi momento que sea tu voluntad, pero si no lo es haz de mí un instrumento tuyo para ayudar a más gente, y creo me brindó esa oportunidad”
En una plática con MILENIO Tamaulipas, el galeno recordó que después de contagiarse en julio y curarse, comenzó con este camino sin imaginar que a la fecha su demanda se expandió entre Reynosa y Matamoros.
Ha visitado más de trescientos domicilios, en los que ha visto dolor, zozobra, inquietud y miedo, en su mayoría personas que además de enfrentar el virus, luchan con la diabetes o la hipertensión.
Una de las anécdotas que más le ha impactado al urgenciólogo, es el caso de una mujer de 60 años en Matamoros, que además de covid-19, padecía obesidad y había pasado por cáncer de mama.
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“Cuando la veo, veo una neumonía muy severa, paciente con obesidad y antecedente de cáncer de mama, y dije “no la va a librar” porque está dentro del grupo vulnerable, pero la señora salió adelante. El gozo que tuve fue total, ella salió adelante, pese a tener todo en contra”.
El entrevistado señaló que otros de las cosas con las que convivió y de la que ha sido testigo cuando la escala crítica de la pandemia parecía una película de terror, porque cada que pasaba por funerarias solo se expedía humo negro de los hornos de cremación a gran cantidad.
“Recuerdo que antes de enfermarme estaba a cargo de la coordinación de la clínica 270 de Reynosa del IMSS, donde me tocaba dar puras noticias de muerte por causa del covid y donde llega un momento en el que te deprimes, realmente son cosas feas”.
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Panoramas como estos, provocan que las personas quieran evitar los hospitales, porque aseguró son las imágenes que observan, entonces piensan que si van a morir por el SARS-CoV-2, mejor morir en casa.
Gustavo Gutiérrez, se ha apoyado en hacer sentir bien al paciente, darle ánimo y conseguir la risa del enfermo, recordarle desde el gusto por su comida o sus actividades preferidas.
ICGC