José Gómez laboraba en una empresa de limpieza, pero por la pandemia provocada por el coronavirus, la crisis económica alcanzó a sus jefes y tuvieron que despedirlo por falta de ingresos, por ello ahora se dedica a recolectar cosas para sacar adelante a su familia.
En entrevista con MILENIO PUEBLA, compartió la difícil situación por la que atraviesa, debido a que desde que llegó el virus al país y al estado, todo se derrumbó para él y su familia.
Narró que hace unos meses contaba con un trabajo estable e ingresos cada 15 días, pero se quedó sin nada para mantener a sus seres queridos; su esposa, nieta e hijo, por lo que su salario era lo que los sacaba adelante.
El entrevistado señaló que desde el comienzo del 2020 el panorama se complicó, debido a que los precios incrementaron pero la economía a nivel nacional no repunta y tampoco mejoró con el cambio de gobierno federal.
Asimismo, resaltó que el virus, le cambió la vida y sus planes de trabajo, ya que hace unos meses se desempeñaba en una empresa en la que hacía el aseo, sin embargo por el confinamiento que provocó el virus perdió su trabajo.
“La empresa en la que laboraba, fue afectada por la enfermedad y pues mi jefes me dieron las gracias y ahora estoy sin trabajo, lo primero que hice fue vender mis pertenencias, como es mi pantallita y DVD, para tener que comer”, enfatizó el Don José.
Precisó que al quedar desempleado, vendió sus pocas pertenencias que tenía como son una pantalla, un DVD y otros aparatos electrodomésticos, con el objetivo de contar con algo de dinero para comprar alimentos.
Sin embargo, indicó que esto no fue suficiente, pues si bien estos aparatos electrónicos le ayudaron a salir adelante unos días, pero el confinamiento continúa y no hay trabajo, por ello para sobrevivir ahora se dedica a recolectar cosas.
“Ahora me dedico a pepenar para tener algo que comer, es lo único que pude encontrar para sacar adelante a mi familia, sin embargo no es suficiente, ya que los gastos no se detienen y no alcance a reunir lo del pago de mi recibo de luz, y me la cortaron”, mencionó.
El afectado refirió que la actividad de recolectar artículos que aún sirven para vender lo ayuda poco, pues no es suficiente para solventar los gastos, debido a que hace unos días le cortaron el servicio de luz, al no reunir la cantidad para solventar este gasto.
Por ello, acude tres veces a la semana por alimentos a las instalaciones de la Asociación Civil “Revitalización del Alto”, en donde regalan comida los días martes, jueves y viernes, con lo que “amortigua un poco los apuros”.
El afectado por el coronavirus expresó que lo más preocupante es que cuenta con una menor de edad, su nieta de tan solo 3 años, por lo que rompió en llanto al recordar que quedó huérfana, por ello hizo todo por lograr la custodia.
“Mi nieta de 3 años y mi hijo de 16 años son mi motor para seguir luchando, aún están chicos y necesitan de mí, por lo que no me importan hacer esto para darles algo de comer y venir a estos lugares donde nos regalan comida; es una Bendición que personas que pertenecen a la de la Asociación nos apoyen de esta manera sin conocernos”, destacó el señor Gómez.
Para concluir, puntualizó que vive en la calle 16 Oriente 1406, a unos pasos de Casa Aguayo, y comentó que esta vez necesita del apoyo de la gente con algún trabajo o despensas. “Si tomamos las medidas adecuadas vamos a volver a ser referencia en el país y a figurar como uno de los estados que mejor salimos adelante de la pandemia”, apuntó.
LEE