Con el fin de disminuir el riesgo de transmisión en los trabajadores del sector salud, familiares, autoridades involucradas y comunidad en general, el gobierno de Puebla emitió un decreto con los lineamientos para el manejo seguro y disposición de cadáveres con causa de muerte covid-19.
Entre las disposiciones legales, se establece como obligatoria la cremación del cuerpo y queda prohíbida la realización de ceremonias fúnebres para estos casos, ya el riesgo de contagio es alto.
"Artículo 15: Una vez realizado el proceso de cremación del cadáver, la urna que contenga las cenizas será entregada a los familiares, sin que se permita llevar a cabo ninguna ceremonia fúnebre".
La cremación deberá hacerse 5 horas después de la muerte en funerarias con la autorización gubernamental correspondiente y los familiares no podrán tener contacto con el cuerpo; además, la empresa a cargo no realizará ningún proceso de limpieza, ni intervenciones de tanatoestética o tanatopraxia (maquillar, vestir o embalsamar) sobre el cadáver.
Además, el personal de salud que atienda y entregue el cadáver deberá usar de manera permanente guante de nitrilo, protección facial por el riesgo de salpicaduras de líquidos corporales o secreciones en el cuerpo o la cara del personal; batas impermeables de manga larga y, en caso de que no sea impermeable, añadir un delantal plástico desechable.
Para su entrega, el cadáver deberá introducirse en una bolsa sanitaria con cierre hermético y plastificado. Su introducción en la bolsa se deberá realizar en la propia habitación de aislamiento y una vez cerrada se deberá rociar en su totalidad con desinfectante hospitalario o con una solución de hipoclorito de sodio al 10%.
"Se deberá colocar una ficha en el frente de la bolsa con los datos personales del fallecido y su fotografía".
También se obliga a que el certificado de defunción sea debidamente desinfectado previo a su entrega a la Oficialía del Registro Civil correspondiente.
Para su transportación, será obligación del hospital informar al conductor de la carroza que se trata de una persona muerta con covid-19 y el proceso a seguir en caso de un incidente; una vez entregado, el vehículo utilizado deberá ser descontaminado con hipoclorito de sodio al 10%.
mpl