La Subsecretaría del Sistema Penitenciario de la Ciudad de México instaló carpas en siete centros de reclusión con capacidad de hasta 150 camas y servicios básicos,para atender posibles casos de internos que presenten síntomas de covid-19.
Hazael Ortega Ruiz, titular de la dependencia, dijo que las carpas forman parte de las medidas preventivas ante la emergencia sanitaria y para garantizar el derecho a la salud de las personas privadas de la libertad.
Destacó que hasta el momento ningún interno ha sido diagnosticado con el coronavirus, debido a que las medidas de prevención fueron implementadas desde marzo, en coordinación con autoridades federales.
Asimismo, indicó que la instalación de las carpas con camas y servicios médicos, tiene la finalidad de aislar y atender a los internos que puedan contraer el coronavirus.
Ortega Ruiz comentó que las personas que viven en los centros de reclusión tienen garantizado el derecho humano a la salud; además informó que se ha priorizado la realización de pruebas para detectar posibles casos de coronavirus en los nuevos ingresos.
El subsecretario informó lo anterior a las autoridades administrativas correspondientes de la Ciudad de México, para así cumplir con las demandas promovidas por una asociación civil establecidas en un juicio de amparo.
Indicó que instruyó a los directores de los 13 centros penitenciarios de adultos, los seis especializados para Adolescentes y al “Torito” para asegurar suministros de higiene, aseo personal y de limpieza de espacios, así como el acceso a la alimentación.
"Contamos una serie de actividades programadas para prevenir contagios, como el filtro para el ingreso de las personas, la atención a grupos vulnerables y toda la limpieza al interior de los centros penitenciarios", señaló Ortega.
Puntualizó que el propósito de las medidas es proteger a la población penitenciaria, a las familias de los internos y a todo el personal de limpieza y administrativo que labora en los centros de reclusión.
Resaltó que se ha aplicado el protocolo de atención ante el covid-19
en los centros, y que lo han implementado desde antes de que fuera emitida la declaratoria de emergencia sanitaria.
El mecanismo de protección ante el coronavirus considera el uso de equipos de protección personal por parte de los trabajadores administrativos y de limpieza, el cual incluye: cubrebeocas, guantes, careta y gorro.
El funcionario comentó que se trabaja para garantizar el contacto de la población de internos, hombres y mujeres, con gente del exterior a través del acceso a tarjetas telefónicas, incremento del tiempo de las llamadas e incluso la realización de videollamadas.
Sostuvo que también se proporciona información sobre el coronavirus a la población en general, a la visita y al personal que labora en los centros penitenciarios: sus formas de transmisión, medidas higiénicas de prevención e identificación de síntomas de alarma.
ROA