Más de un centenar de ejidatarios del municipio de San Salvador Atenco, en el Estado de México, dedicados a la agricultura y ganadería, se quedaron sin agua tras la construcción de una brecha que desvió el caudal principal que abastece sus parcelas.
La desviación apareció en una zona conocida como El Salado, colindante con el municipio de Acolman, presuntamente para abastecer de aguas negras a la Ciénaga de San Juan, considerada como Área Natural Protegida (ANP) en el Lago de Texcoco.
“Tenemos la sospecha de que fue entre el lunes y martes porque como estábamos preparando los riegos nos dimos cuenta que no llegaba el agua, decidimos hacer una vuelta y nos encontramos con esto”, explicó Manuel Pineda, ejidatario de Santa Isabel Ixtapan.
A pesar de que la zona es considerada de uso común, los comuneros descubrieron maquinaria pesada que desvió el caudal por cerca 100 metros para introducirlo hacia una zona de humedales, cercanos al proyecto federal Parque Nacional Lago de Texcoco.
“Estamos aquí varios compañeros porque nos estamos viendo afectados ahorita que ya es la siembra no tenemos esa agua y el tiempo nos está ganado porque ya es hora de sembrar maíz, avena y alfalfa y esas son nuestras entradas”, agregó Manuel Pineda.
Para los vecinos de la zona, la introducción de maquinaria pesada presuntamente fue realizada por personal de la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp) y la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), sin considerar las afectaciones a los pobladores de la región.
“Según ellos quieren llenar el Lago de Texcoco, pero es muy poca agua y la están desviando porque ya hasta al final donde desviaron llega poquita y a nosotros si nos perjudica porque ya tenemos nuestras tierras sembradas y ya no nos llega el agua”.
“A pesar de que toda esta área del canal es del pueblo de Santa Isabel Ixtapan y de uso común y queremos saber quién abrió porque nos están perjudicando como ejidatarios que tampoco recibimos ayuda del gobierno y ahorita que estamos en la mera sequía y si nos quitan esta agua qué vamos a hacer”, comentó Uriel Pineda, ganadero de Atenco.
Por el caudal de casi siete kilómetros de longitud corren cerca de 170 litros por segundo de aguas negras provenientes del sistema de desagüe de la Termoeléctrica de Ecatepec, en la zona norte del Valle de México.
A su paso, el líquido recorre colonias como Lázaro Cárdenas, La Laguna y Las Brisas hasta llegar a una zona de uso de común del poblado de Santa Isabel Ixtapan, perteneciente al municipio de San Salvador Atenco.
En ese punto, los comuneros habilitaron una planta de tratamiento que contempla un sistema de rebombeo para finalmente utilizar el líquido para el riego de sus tierras de aproximadamente 100 hectáreas dedicadas a la cosecha de alimentos.
“Este canal está hecho desde hace más de 30 años y lleva agua que es utilizada para riego para nuestros ejidos y no había tenido conflictos hasta apenas que lo declararon Área Natural Protegida y quieren llevarse el agua para la Cienega de San Juan”
“No alcanza el agua, en todos los lugares la sequía está provocando la resequedad de los humedales. Ya algunos compañeros tiraron sus semillas y no han regado y tenemos una tolerancia de siete días para poder humedecer la tierra y si en ese tiempo no se arregla esa situación vamos a perder la cosecha”, concluyeron.
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