En el Estado de México hay documentados ríos y lagos con niveles de toxicidad que supondrían daños para los seres vivos. De acuerdo con el estudio “Calidad del agua en México” de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), algunos de ellos están localizados en los municipios de Aculco, Tecámac, Texcoco y Tlalnepantla, por mencionar algunos.
Los datos del estudio fueron actualizados hasta su último corte en 2019 y fueron aplicados de acuerdo a las normas oficiales en la materia que emplean microorganismos para llevarlos a cabo.
En el caso del norte de la entidad aparece Aculco y es que la cuenca del Río Ñado alimenta al Arroyo La Cofradía Aculco y al Río Aculco, los cuales en las mediciones de enero del 2019 mostraron presencia de agentes tóxicos, sin embargo, para el periodo de agosto de ese mismo año manifestaron niveles casi menor a un punto.
El agua del Puente de Vigas en el municipio de Tlalnepantla registró en los estudios entre 6.143 y 7.639 unidades de toxicidad en enero del 2019, pero los niveles disminuyeron a menor a punto el 14 de agosto de ese año.
Caso similar al cuerpo de agua de San Lucas –Puente Chalco-, ya que febrero los datos oscilaron entre las 4.883 y 6.098 Unidades de Toxicidad, pero bajaron de igual modo a menor a un punto. El caso del Lago Nabor Carrillo 1 y 2 ubicado en el municipio de Texcoco es particular, ya que este cuerpo de agua artificial posee en su último análisis del 19 de febrero un promedio de 22.605 Unidades de Toxicidad, lo que lo convierte en un cuerpo contaminado.
El gran canal de Tecámac también figuró en la lista con un pro medio de 19.053 unidades en su estudio de marzo.
MMCF