Después de más de 14 años, autoridades notificaron sobre la sentencia condenatoria en contra de Juan Sánchez Moreno, por el delito de tortura en contra de la periodista Lydia Cacho, hecho cometido en diciembre de 2005.
Ese año Sánchez Moreno era comandante para el Cumplimiento de Mandamientos Judiciales de la entonces Procuraduría General de Justicia de Puebla y fue parte de los implicados en la tortura perpetrada contra la periodista, en el sexenio del ex gobernador Mario Marín Torres.
La autora del libro Los demonios del Edén, el poder que protege a la pornografía infantil no brindó postura sobre la notificación pero retuiteó el mensaje emitido por Artículo 19.
"El día de hoy 15 de enero, nos fue notificada la sentencia condenatoria en contra de Juan Sánchez Moreno, por el delito de tortura en contra de la periodista @lydiacachosi cometido en diciembre de 2005."
La periodista expresó el 10 de enero que aunque señaló las violaciones de sus derechos humanos en 2005 no obtuvo justicia, incluso pese a las grabaciones que mostró ante todas las autoridades, donde exhibió la operación de un red criminal.
"Han pasado casi 14 años, no lo logramos, pudo más la fuerza de los criminales que la honestidad de la prensa, la valentía de los niños y niñas víctimas y mis esfuerzos acompañados de la solidaridad social invaluable", dijo esa vez.
Habló de la responsabilidad del gobierno y señaló que la disculpa que le ofrecieron fue sólo el primer paso de la reparación íntegra, pues su deseo es que los autores estuvieran bajo juicio, exhorto que hoy se ve en parte cumplido con la sentencia dictada contra Juan Sánchez Moreno, quien en su momento ejecutó la detención de la periodista.
Sánchez Moreno tendrá que pasar cinco años con tres meses en prisión y pagar una multa de 12 mil 113 pesos con 75 centavos, además de que le serán suspendidos sus derechos civiles y políticos.
La defensa legal de Artículo 19 acompañó a Lydia Cacho para alzar la voz contra los torturadores y fue ésta la que expresó en redes sociales que la sentencia contiene una pena que no atiende a la gravedad de los hechos de tortura ni al puesto de mando que ocupaba Sánchez Moreno.
Cabe recordar que aunque hace 9 meses la FEADLE (área especializada de la Procuraduría General de la República, encargada de investigar y perseguir delitos contra la Libertad de Expresión) giró órdenes de aprehensión contra Mario Marín, Kamel Nacif y Hugo Karam, hasta la fecha no han sido detenidos y queda pendiente la justicia.
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