La cantidad de delitos que se cometen en la entidad ha ido en aumento, y con ello el número de jóvenes que participan en la comisión de los mismos.
- Te recomendamos Paro en GM impacta en la economía de Guanajuato Comunidad
Tan sólo del 2015 al 2022, hasta un 2000% se ha incrementado las detenciones de menores por delitos, como la trata de personas, el narcomenudeo y los homicidios; así reflejan estadísticas proporcionadas por el Poder Judicial del Estado.
Estos datos, proporcionados por el Poder Judicial a través de una solicitud de transparencia, brindan un panorama más amplio de la situación de inseguridad que se vive en el estado de Guanajuato, mostrando que los adolescentes de hasta 17 años de edad, también han sido llevados ante un juez por la comisión de delitos graves.
El número de menores vinculados por este tipo de actos mostró un aumento considerable desde el año 2015, donde la apertura de procesos penales no superaba las 400 en total. Posteriormente, fue en el 2020 cuando, luego de alcanzar su pico más alto, la cifra pasó de 8 mil 047 a 7 mil 167.
Sin embargo, a partir del 2021, la cifra tuvo un nuevo repunte, y para este 2022 el número total de menores responsables de delitos fue de 8 mil 979; dando con ello una suma de 47 mil 745 en un periodo de siete años.
El abogado litigante, José Morales, explicó que sí se puede observar un incremento en la gravedad de este tipo de delitos, lo que corresponde al entorno de inseguridad que se vive en el estado, donde, como lo publicó Milenio / Telediario el pasado 2022, los menores incluso son reclutados por el crimen organizado.
“Creo que es parte de lo que hoy en día, pues nuestra sociedad, con problemas de inseguridad, y como resultado de las actividades de narcotráfico, pues ha llevado a que también los adolescentes participen en esta serie de actividades”, explicó.
De acuerdo con José Morales, esto se relaciona con el hecho de que las leyes aplican de manera distinta en el caso de los menores, pues bajo el principio del ‘interés superior’, se busca que estos crezcan en entornos sanos y seguros, y se prioriza el recurrir a medidas alternas para reparar el daño. En este sentido, se interpreta no sólo que los menores sí son utilizados para llevar a cabo actividades delictivas, sino que también, las vinculaciones a proceso, mismas que constituyen solo el inicio de un proceso penal, superan considerablemente a las sentencias dictadas en contra ellos.
“Las estadísticas sí van a variar mucho respecto a las sentencias y vinculaciones a proceso […] sí hay una gran diferencia entre una estadística de vinculaciones a proceso, de otras que efectivamente haya una sentencia penal. Es decir, es mucho mayor en la estadística en temas de vinculación a proceso, que efectivamente tengamos sentencia. También influyen otros factores. Muchos casos implican salidas alternas, y en materia de adolescentes, el principio básico es buscar esas salidas alternas por medio de la conciliación”, precisó.
En las estadísticas se observa que en el año 2015 los principales delitos cometidos por los adolescentes estaban relacionados con el narcomenudeo, principalmente en sus modalidades de posesión y suministro, donde incluso se veían involucrados las lesiones y el robo calificado.
Aunque, con el paso del tiempo, se han ido incorporando otros actos, cada vez más preocupantes, entre los que destacan la posesión de armas, la explotación de otros menores con fines de comercialización de droga, el homicidio calificado y las lesiones.
MKHC