Ely es la última elefanta africana que vive en la Ciudad de México, luego de que hace 10 años la compró el Zoológico de Aragón, para rescatarla del circo donde la explotaron durante 25 años, provocándole problemas en una de sus patas y piel; sin embargo, actualmente se analiza que deje el recinto y sea trasladada a un santuario en Brasil.
En el zoológico, Ely ha estado bajo el cuidado de Marco Antonio Badillo, quien usa la técnica del condicionamiento operante, con el que aprendió a dejar que la revisen sin estrés, mientras interactúa con sus cuidadores y permite que la cepillen o hasta le hagan pedicure.
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Con este método, es posible que el personal le revise a diario la piel, orejas y sus ojos, a cambio de una recompensa: un balde de fruta.
Ely llegó al Zoológico de Aragón en el 2012, habita en un albergue especialmente adaptado para el cuidado de elefantes, pero en el 2017, la asociación civil Abriendo jaulas, abriendo mentes, comenzó una campaña para trasladar a la elefanta a un santuario en Brasil.
Como parte de un movimiento internacional para sacar a los elefantes del cautiverio, la asociación lanzó una petición en la plataforma Change.org, que suma más de 157 mil firmas que apoyan el retiro de la elefanta a un santuario.
En días recientes, la campaña cobró impulso, debido a que el pasado 11 de agosto, en el marco del Día Mundial del Elefante, los activistas solicitaron directamente a la jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, trasladarla al país sudamericano.
"La queremos liberar del encierro en el que se encuentra y de las cadenas mentales que ella tiene. Nuestro único objetivo es lograr que un ser tan maravilloso, consciente, inteligente, de manada, terminé sus días, que esperemos que sean muchos, en un lugar adecuado para ella, ya que se le privó de esto por muchísimos años", dijo Diana Valencia, directora de Abriendo Jaulas, Abriendo Mentes, en entrevista con MILENIO.
En 2022, la organización promovió un juicio de amparo para sacarla del Zoológico de Aragón, siguiendo el poder judicial argentino, pero aquí no prosperó.
El primer amparo que se llevó a cabo, el 13 de agosto del año pasado, fue para que Ely fuera declarada ‘persona no humana’ y poder ser ella quién solicitará su propia libertad siendo ‘persona no humana’, ese juicio fue desechado.
Este año el juicio fue de nuevo aceptado, pero ahora se estudia si la tenencia legal de Ely en el zoológico, vulnera los derechos humanos de su abogada.
"El ser humano es el único que tiene derecho a ampararse, y al desecharse lo de persona no humana de Ely, entra la abogada como ser humano que le afecta la situación de Ely".
El juez no analiza traslado, afirma Zoológico
La Dirección General de Zoológicos y Conservación de la Fauna Silvestre, explicó que el recurso “habeas corpus”, promovido por la abogada fue desechado inicialmente por un juzgado, toda vez que es un recurso legal creado para asegurar el derecho a la libertad de los seres humanos que han sido detenidos ilegalmente por una autoridad, y “no es un recurso aplicable a los animales no humanos”.
Derivado de esta resolución, la abogada interpuso un recurso de queja por medio del cual el tribunal de alzada ordenó se admitiera un juicio de amparo con la finalidad de estudiar si la tenencia legal del ejemplar del elefante africano vulnera los derechos humanos de la abogada, “toda vez que el recurso de habeas corpus ya había sido desechado.
La Secretaría de Medio Ambiente capitalina subrayó que con dicho recurso, “el juez no está analizando específicamente el traslado de la elefanta africana a ningún santuario, lo que en realidad se analiza es si la tenencia legal del elefante vulnera los derechos humanos de la abogada, quien ha señalado un supuesto maltrato, aunque no ha mostrado ningún elemento para comprobar su dicho”.
Además, el zoológico subrayó que la elefanta africana fue comprada a un circo, “con un gran esfuerzo para rescatarla, porque el circo ya no la podía mantener y también para darle un espacio adecuado, mejores condiciones y proporcionarle la atención especializada que requiere un elefante africano”.
Estereotipias
Desde que comenzó la campaña para el traslado de Ely, Diana Valencia mostró con videos colgados en Twitter que Ely padece estereotipias, es decir, movimientos involuntarios y repetitivos, ya que estando de pie, balancea la cabeza y hombros, o el cuerpo entero de lado a lado, lo que ha llamado la atención de la opinión pública.
Pero la Asociación de Criaderos, Zoológicos y Acuarios de México (Azcarm), sostiene que se trata de una consecuencia por la explotación sufrida durante 25 años en el circo.
“Son animales que tienen estereotipas, y cosas que se van formando, de estar las 24 horas del día amarrado de cuatro patas con una cadena”, dijo Ernesto Zazueta, presidente de la Azcarm.
Además, la Azcarm sostiene que Ely goza de los mejores cuidados en el Zoológico de Aragón, y que en caso de requerirse un traslado, los centros de rescate del país pueden albergar a la elefanta, con lo que reprochó que la asociación pretenda enviarla a Brasil, a un santuario que dijo “es un negocio” y cuyo viaje sería dañino para el paquidermo.
“Qué estamos fracasados, no tenemos lugares, especialistas que sepan de los animales, como para tenerlos que llevar a Brasil. Es una payasada, a lo mejor ellos creen que presionando al gobierno con sus campañas de desprestigio van a ganar algo, pero no, San Juan de Aragón no está solo, estamos muchos con ellos, todo el gremio de veterinarios y Ely está super bien atendida”, aseguró.
Cuidado de Ely en Aragón ha sido adecuado: Profepa
La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) confirmó que el plan de manejo y cuidados médicos de Ely, desde su arribo al zoológico han sido los adecuados para atender debidamente los padecimientos crónicos degenerativos que presenta desde hace 5 años.
“Ely llegó en septiembre del 2012 al zoológico de Aragón, así lo constata el expediente clínico. La revisión de éste, entregado tras la visita de inspección practicada por parte de los inspectores de la Profepa, constata que el zoológico ha dado atención y seguimiento al estado de salud del ejemplar”, indicó la dependencia en una tarjeta informativa.
La Profepa explicó que el pasado 25 de agosto, llevó a cabo una nueva visita de inspección para verificar el estado físico de la elefanta, para cerciorarse de los métodos e instrumentos de manejo apropiados, y condiciones del lugar y seguridad donde se encuentra.
“Durante la visita de inspección se verificaron las condiciones en cautiverio que se proporcionan a la elefanta “Ely”, constatando el albergue en general, el exhibidor, las casas de noche, mismas que son adecuadas y cuentan con suficiente espacio para la especie, así mismo las casas de noche se encuentran adaptadas con piso especial para amortiguar el descanso de la elefanta, mientras que el exhibidor cuenta con diferentes texturas como pasto, tierra, concreto, un estanque y cascada, para que el ejemplar pueda desarrollar los comportamientos propios de su especie”.
Además, constató que a la ejemplar se le proporcionan sesiones de enriquecimiento ambiental y ocupacional, las cuales constan de colocar costales de yute grandes y chicos, o estructuras grandes tubulares, para aumentar los desafíos, y evitar las conductas anormales o estereotipias, fomentando la manifestación de expresiones naturales de su comportamiento, indicó.
Diana Valencia reconoce que el condicionamiento operante al que han sometido a Ely en el zoológico es bueno, pero lo mejor para ella es vivir en un ambiente sin jaulas.
"Obedecía al castigo, cómo no va a reaccionar positivamente ante el estímulo de lo que más le gusta que es la fruta, está muy bien condicionada eso no puede negarse, pero ella tiene el derecho de vivir en un ambiente natural y tomar sus propias decisiones", afirmó.
Resaltó que a partir de los juicios y de que el tema volvió a la opinión pública, esta administración “se ha esmerado mucho en qué la situación de Ely se presente adecuadamente, le dan mucho mejor de comer, con más frecuencia, la atienden más”.
FLC