Metepec es reconocido a nivel nacional e internacional por sus artesanos; sin embargo, en dos años 50 maestros metepequenses dejaron de ser parte del padrón registrado por el municipio, lo que representa una disminución de 11 por ciento, de acuerdo a información del ayuntamiento.
En 2018 había 466 artesanos ubicados en el territorio municipal, de estos 167 eran mujeres y 299 hombres; para 2020 el número bajó a 416, 320 y 96 respectivamente. Esto muestra una disminución mayor en el sector femenino al pasar de representar 35.8 por ciento a 23 por ciento, mientras los varones subieron de 64 por ciento a 77 por ciento.
El registro arroja que existen un total de 169 talleres ubicados en todo el territorio municipal; 155 de alfarería y el resto dedicados a la pirotecnia, talabartería, papel picado, textiles, hojas de maíz, vidrio soplado y tejido de hoja de palma.
Aunque no se especifican las razones de la disminución, maestros artesanos como Javier Carrillo Soteno, Oscar Sánchez, Javier Aguirre y miembros la familia Hernández Arzaluz han declarado en diferentes entrevistas que las nuevas generaciones ya no muestran tanto interés por aprender la técnica que han heredado por generaciones.
Otra tema que mencionan constantemente es que la sociedad no valora el trabajo artesanal y enfrentan al regateo, a intermediarios o a la falta de ventas para obtener ingresos y mantener a sus familias, es decir, no cuentan con una regularización que les garanticen precios justos para sus piezas.
Pese a lo anterior su trabajo ha sido reconocido y han ganado premios en certámenes como el Concurso Nacional de Alfarería Árbol de la Vida que se realiza en el marco de la Feria de San Isidro, así como el concurso CatrinArte.
Además han llegado a otros países con sus piezas únicas, están presentes siempre en las ferias y festivales, aunado a que su trabajo se puede encontrar en diferentes partes del Estado de México como en la Sala Felipe Villanueva, en el Museo del Barro o en el parque lineal de Metepec.