A un año del colapso del puente peatonal “Los Rosales” que cruza sobre el canal Río de la Compañía, autoridades del Estado de México inauguraron una nueva infraestructura en beneficio de más de 21 mil habitantes de los municipios de Chimalhuacán y Nezahualcóyotl.
La gobernadora mexiquense, Delfina Gómez Álvarez aseguró que para esta obra realizada en una detención de mil metros cuadrados se invirtieron 4.24 millones de pesos y cuenta con una cimentación de concreto con acero a 18 metros de profundidad y una trabe de concreto armado de 59 toneladas y 30 metros de longitud para garantizar su estabilidad.
Además se colocaron barandales y rampas de acero para permitir el acceso a personas con discapacidad y ciclistas.
“No era nada más hacer una obra por hacerla, teníamos que hacer un puente bien construido, porque el tipo de suelo es muy especial y no queríamos que pasara lo mismo que en el otro puente”, dijo.
Cómo obras complementarias, autoridades realizaron jardinería, limpieza del Río de la Compañía y revestimiento de las paredes del mismo cuerpo de agua.
Más de 20 mil habitantes cruzan este puente
Este puente es uno de los más utilizados de la zona, en promedio las más de 20 mil personas que habitan en el lugar lo cruzan dos o tres veces al día para cruzar entre Nezahualcóyotl y Chimalhuacán, además de que, en estos días de celebración por el Día de Muertos, miles de personas de diversos municipios acuden a visitar a los difuntos en los panteones “Los Rosales”, ubicados en ambos municipios y considerados como unos de los más grandes de la entidad.
Colapso de puente peatonal
El 2 de noviembre del 2023 el puente peatonal Los Rosales colapsó mientras decenas de personas cruzaban hacia el panteón con el mismo nombre para visitar a sus difuntos.
El accidente dejó más de 10 personas lesionadas, por lo que la estructura fue retirada y durante un año las personas tuvieron que utilizar un puente vehicular aledaño.
Aparentemente, el puente peatonal ya presentaba daños y vecinos lo habían reportado, incluso, Protección Civil de Chimalhuacán realizó una inspección y determinaron que no era viable para el uso de la población, por lo que lo clausuraron, pero debido a que su uso era indispensable los habitantes violaron los sellos y siguieron pasando por la zona.
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