Hace ocho años, el 22 de julio de 2013, como parte de los festejos por el 151 aniversario de la Batalla de Puebla, se puso en funcionamiento la noria de observación conocida como La Estrella de Puebla. Por su dimensión y diseño recibió la acreditación del récord Guinness como “La rueda de observación portátil más grande del mundo”.
Su diámetro es de 69.8 metros y su altura de 80 metros. Cuenta con 54 góndolas para ocho pasajeros cada una, cuatro denominadas de lujo o VIP, por poseer pisos de vidrio y asientos de piel.
Este atractivo turístico se instaló a un costado de la zona comercial Angelópolis, en el camellón de la avenida Osa Mayor, por lo que forma parte del Parque Lineal, un complejo turístico que combina un circuito de trote y ciclovía.
Dicho circuito conecta con el Jardín del Arte, con dos restaurantes y dos lagos artificiales, así como dos pistas de trote y un paso elevado de 800 metros. Además, también permite visitar el Eco Parque Metropolitano, el Paseo del Río Atoyac y el Museo Internacional Barroco.
Esta rueda es modelo R80XL y fue fabricada por la empresa alemana Maurer German Wheels GmbH; es la más grande de las ruedas transportables o portátiles, es decir, puede desensamblarse y colocarse en otro sitio, por lo que no requiere cimientos para ser instalada.
El tiempo estimado de una vuelta completa de la Estrella de Puebla es de 20 minutos, en los que se puede disfrutar la panorámica poblana desde un ángulo único, que incluye los volcanes Popocatépetl e Iztaccíhuatl. Al pie de esta noria hay una fuente con bancas y una cafetería. Alrededor hay varios centros comerciales, restaurantes y bares.
Actualmente, este atractivo turístico está fuera de servicio debido a la pandemia y porque las autoridades estatales difundieron que gobiernos pasados le negaron mantenimiento. Debido a esta situación, ahora se requiere de un dictamen para conocer el estado en que se encuentra, para determinar cuándo y qué haría falta para que vuelva a operar.
Las autoridades también denunciaron que la plataforma, en la que se combina una estructura metálica y de madera, ya está vencida, por lo que no hay certeza en la seguridad de su operación.
Otro de los factores por lo que se mantiene cerrada es que algunas piezas de la Estrella fueron robadas o sustituidas por otras de menor calidad; empero, las originales fueron halladas y recuperadas en un taller ubicado en Izúcar de Matamoros.
Nacimiento opaco
La Estrella de Puebla surgió en medio de una polémica, pues originalmente se pensó colocar en el Parque Nicolás Bravo, pero tras diversos estudios del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), se decidió que era inviable su colocación.
Después, el gobierno de Puebla creyó pertinente erigirla en el Centro Escolar Niños Héroes de Chapultepec (Cenhch), pero esto causó descontento entre los padres de familia y vecinos, por lo que finalmente se instaló en la zona comercial Angelópolis.
Ahora, el gobernador Luis Miguel Barbosa Huerta gestiona su traslado a la zona de San Francisco, uno de los primeros barrios en erigirse en la ciudad, lo que, en su decir, detonaría y reactivaría la actividad económica de ese sitio.
Tendencia en el mundo
Por otra parte, cuando George W. Ferris construyó la primera noria del mundo para la Exposición Colombina del Mundo de 1893 celebrada en Chicago, comenzó una tendencia. Con una altura de 264 pies, fue una vista imponente en la feria mundial y atrajo mucha atención y pasajeros. La noria original fue destruida en 1906, pero a través de los años se han erigido miles de llantas similares.
En Coney Island, está la rueda de las Maravillas; la Niagara SkyWheel de 175 pies está en las Cataratas del Niágara; en Fukuoka, Japón, Sky Dream Fukuoka; en el Century Amusement Park en Henan, China, la rueda de la fortuna de Zhengzho; en Changsha, China, la noria de Changsha.
En Melbourne, Australia, la Melbourne Star; en Suzhou, China, la noria de Suzhou; en el Expocity en Osaka, Japón, está el Redhorse Osaka Wheel; en el parque temático Lihpao Land en Taichung, Taiwán, The Sky Dream; en una de las riveras del río Támesis en Londres, se puede apreciar la London Eye.
AFM