Faltan herramientas jurídicas y recursos para rescatar al Atoyac

Se requiere de acuerdos específicos de los gobiernos de Puebla y Tlaxcala, indico Verónica Mastretta.

Vista actual del Río San Francisco, parte de la cuenca del Atoyac, en su paso por la capital poblana. (Andrés Lobato)
Jaime Zambrano
Puebla /

El rescate de la cuenca del Atoyac es posible; sin embargo, actualmente, falta voluntad política, recursos, una reestructuración administrativa para que en el plan trabajen la Secretaria del Medio Ambiente, Desarrollo Sustentable y Ordenamiento Territorial del gobierno de Puebla, con la integración de la Comisión Estatal de Agua y Saneamiento del Estado de Puebla (CEAS) y del Instituto Estatal de Planeación alineado a disponibilidad hídrica.

De acuerdo con Verónica Mastretta Guzmán, consejera de la organización Dale la Cara al Atoyac, para rescatar los afluentes de la zona metropolitana de Puebla, se requiere que los gobiernos estatales de Puebla y Tlaxcala ayuden a los municipios a fortalecer sus reglamentos y herramientas jurídicas para controlar lo que sucede en sus territorios.

Resaltó la importancia de que, desde los gobiernos de los estados se realice la coordinación de los acuerdos específicos para detener las descargas de contaminantes y trabajar de manera conjunta en la aplicación de la norma y en la limpieza de las aguas residuales.

Ante los reportes de los laboratorios que analizan muestras de agua tomadas en la cuenca del Alto Atoyac, que muestran niveles de alta contaminación y contaminación fuera de escala, es decir, por arriba de los criterios establecidos por las autoridades federales, Mastretta Guzmán destacó Dale la Cara al Atoyac propuso el camino para la recuperación en la Agenda Integral para la Gestión Hídrica y Ordenamiento Territorial.

“Hace un par de años, como Dale la Cara al Atoyac, presentamos una agenda del agua. Pese a que la Ley de Aguas Nacionales no les da mayores atribuciones en inspección y vigilancia a los gobiernos estatales, sí les asigna el rol fundamental de coordinar a la federación con los municipios. Las administraciones estatales pueden tener la voluntad política y el liderazgo para que comiencen a suceder las acciones para atender el problema. La Agenda Integral para la Gestión Hídrica y Ordenamiento Territorial que realizamos prioriza antes que nada la planeación y el trazo de una estrategia antes de emprender acciones y gastos sin rumbo”, apuntó Mastretta Guzmán.

De acuerdo con los resultados de pruebas de laboratorios que trabajan para las autoridades federales y estatales, en el río Atoyac, a la altura de la zona ubicada entre San Pedro Cholula y Puebla capital, se detectó contaminación mil 800 por ciento por arriba de la norma para determinar agua limpia; mientras que en el río Alseseca se registró una contaminación de dos mil 300 por ciento superior a la norma.

“Ahora, falta que los gobiernos estatales ayuden a los ayuntamientos para que se fortalezcan los Códigos Reglamentarios Municipales y se establezcan herramientas jurídicas para controlar lo que sucede en sus territorios”, apuntó.

Para Mastretta Guzmán, el Convenio Marco para el Saneamiento del Río Atoyac firmado por la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), a través de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), con los gobiernos de Puebla y Tlaxcala, y los ayuntamientos, será positivo si se concreta el Programa Hídrico Regional de la región IV del Balsas.

“Antes se firmaron convenios, uno durante la administración de Mario Marín y otro en 2011, a principios de la administración de Moreno Valle. No se logró mayor cosa que construir obras que no fueron parte de una planeación estratégica. Vero algunos elementos distintos en el convenio de este año. Es novedoso que se haya planteado una coordinación desde las oficinas centrales y dos enlaces en cada uno de los estados y que se haya señalado como primera prioridad el formular el Programa Hídrico Regional de la región IV del Balsas. El comité directivo ha decidido contactar a los actores relevantes como investigadores y especialistas. Esperamos que, con la firma de coordinación, la recomendación de la CNDH y la agenda que propusimos en 2018 avance”, destacó Mastretta Guzmán.

mpl

LAS MÁS VISTAS