La presidenta de Fundación Camina, Jazmin Viramontes Fabela, señaló que pese a la publicación de la Ley General de Movilidad y Seguridad Vial, que prevé acciones en materia de seguridad, todavía no se generan las políticas públicas necesarias para que todos los proyectos gubernamentales incluyan acciones que permitan a los peatones, ciclistas y usuarios de transporte publico condiciones de uso y apropiación de los espacios públicos.
En México, resaltó, cada año se registran 16 mil muertes por accidentes de tránsito, de los cuales 40 por ciento son peatones, por lo que la ley que se publicó este año busca generar un diseño de movilidad que considere condiciones de género, edad, infraestructura y conciencia de que todo proyecto debe estar planteado de manera integral.
“En México hay importantes retos que enfrentar y el desarrollo de políticas públicas que permitan mejorar la seguridad, infraestructura y desarrollo de la movilidad para la ciudadanía”.
Iniciativa “Movilidad Segura”
A estos ejercicios, apuntó, se están sumando la iniciativa “Movilidad Segura” que incluye 70 organizaciones que buscan proteger la vida de las personas desde los municipios y propone acciones fundamentales tales como hacer cambios en sus presupuesto para infraestructura para peatones, garantizar el cumplimiento de las velocidades permitidas en cada espacio acorde a los aforos y tipo de usuarios, calles diseñadas acorde a los límites de velocidad, así como sancionar a quienes incumplan dichas disposiciones.
“Desde la sociedad civil también se puede aportar en estos temas, privilegiando el uso de espacios seguros, banquetas, cruces peatonales, así como evitar que se estacione vehículos en las banquetas, una condición que está reglamentada pero que pocas personas respetan”.
Finalmente, Viramontes Fabela subrayó que también son indispensables políticas públicas con perspectiva de género, ya que los recorridos de los patrones no son solo pendulares, es decir, no se establecen en muchos espacios, pues van de la casa al trabajo y de vuelta.
“En el caso de las mujeres aún se desarrollan en un contexto mucho más complejo, en el que asumen muchos más roles y actividades relacionadas a las actividades domésticas como el cuidado de los hijos, las actividades escolares, compras dentro de la comunidad y el cuidado de los adultos mayores”.
MMCF