Un sábado de gloria atípico vivieron poblanos por el cierre de balnearios en la capital poblana, así como en los municipios de Atlixco, Izúcar de Matamoros, Tehuacán, San Martín Texmelucan y Cholula, por la disposición de las autoridades para evitar concentraciones masivas y prevenir contagios de coronavirus.
Uno de los establecimientos más visitados en esta época del año es Agua Azul, localizado al sur de la capital poblana, el cual permaneció cerrado al público después de ocho décadas de recibir a decenas de familias que aprovechan esta temporada para refrescarse por las altas temperaturas.
En su momento, Adrián Eleazar Armenta Román, jefe de Departamento de Salvavidas, señaló que no se había cerrado el lugar desde que trabaja en los últimos 42 años.
"Desde hace 42 años que trabajo aquí no habíamos tenido un cierre de tanto tiempo y es la primera vez que no tendremos una apertura en temporada tan fuerte como es Semana Santa, pues en tan sólo un Sábado de Gloria se reciben más de 10 mil personas y ya muchos eran turismo tanto local como nacional", enfatizó.
Comentó que los 60 trabajadores realizan labores de mantenimiento de cada área para tener en óptimas condiciones el balneario.
El ayuntamiento de Puebla giró instrucciones a los balnearios conforme a la Secretaría de Salud federal y la Secretaría de Gobernación estatal de permanecer cerrados hasta nuevo aviso para proteger la salud de las personas.
La recomendación se hizo desde el pasado 19 de marzo, sin embargo, en esta ocasión la suspensión tiene carácter de obligatoria por indicación del gobierno estatal.
Personal de Protección Civil estatal, Bomberos, así como de la Secretaría de Protección Civil y Gestión Integral de Riesgos mantuvo recorridos para supervisar que los establecimientos acataran la medida ante la contingencia sanitaria.
También se realizaron operativos en lagunas, ojos de agua y ríos a fin verificar que se cumplieran con las disposiciones del cierre obligatorio.
Minerva Schiavon, integrante de la Asociación Nacional de Balnearios, indicó que las pérdidas por el cierre de establecimientos son significativas, ya que en esta temporada registran hasta el 40 por ciento de sus ingresos anuales.
En entrevista, explicó que durante el periodo vacacional de Semana Santa registran ingresos hasta de 15 mil personas, sin embargo, ante la emergencia sanitaria por el coronavirus se acataron las disposiciones lo que derivó en la pérdida de empleos eventuales.
Por último, Schiavon señaló que algunos establecimientos mantienen personal que realiza algunas labores de mantenimiento a las instalaciones como es el caso de poda de jardines, limpieza de albercas y toboganes, a la espera de volver a abrir sus puertas cuando la contingencia termine.
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