Geovanni Mateos es originario del estado de Puebla, desde niño junto a su familia se dedicó a la producción del pulque, pero las ganas de salir adelante lo llevaron hasta el Estado de México y en el municipio de Chimalhuacán encontró una oportunidad.
Desde Puebla traía la “bebida de los dioses” natural y en Chimalhuacán preparaba los llamados “curados” para vender, pero con el paso de los años sembró sus propias plantas y ahora su pulque es 100 por ciento mexiquense.
“Es una bebida muy socorrida ahora, pero antes fue muy desaprovechada, las cerveceras la desprestigiaron para que la gente ya no comprara, pero es una bebida que además de ser deliciosa tiene hasta excelentes propiedades para la salud”.
De tamarindo, fresa, guayaba, avena, piñón, mamey, nuez y decenas de sabores más son las que ofrece “Las tlachiqueras poblanas”, pero no es el único negocio, hay decenas de productores de pulque en Chimalhuacán que buscan reactivar el oficio del tlachiquero y que el maguey vuelva a ser una actividad económica.
Primera Feria del Maguey
Por ello, en este municipio mexiquense se realizó por primera vez la Feria Cultural del Pulque a fin de incentivar la economía de los productores locales de la bebida ancestral.
El primer encuentro de productores se realizó en la comunidad de San Juan Zapotla, en el cerro del Chimalhuache, como parte del Tianguis Agropecuario y del Truque que se organiza para apoyar a los productores agrícolas y pecuarios.
Jonathan Noriega, titular del departamento de Fomento Agropecuario, explicó que la feria que inició el viernes 16 de diciembre y concluirá el domingo 18, busca también reactivar la venta de pulque y la producción de maguey.
“Antes en Chimalhuacán habían cientos de magueyes, aquí se producía pulque y se utilizaba la planta para la barbacoa, los mixiotes, agujas, hilo, todo en lo que se puede aprovechar la planta, pero poco a poco comenzó a perderse esta tradición”.
En la feria además se dio la oportunidad a otros productores de comida orgánica, artesanías y conservas naturales para que pudieran ofrecer sus productos.
Rescate
De acuerdo con autoridades locales, el maguey estaba prácticamente extinto en el municipio y pobladores comenzaron a plantarlo nuevamente en la zona alta. El cerro del Chimalhuache se ha convertido en el lugar idóneo para el rescate de los magueyes, pero la mancha urbana ha dificultado su siembra.
Al momento se estima que se han logrado sembrar más de mil plantas, algunas en viviendas, en traspatios de productores y otras en campos de cultivo.
“Es mejor que un árbol, produce más oxígeno y ayuda a captar más agua que un árbol. El maguey ayuda al medio ambiente y a la economía local; queremos que vuelva a ser un referente del municipio”, finalizó.
MMCF