La elefanta africana Gipsy llegó este lunes al Centro de Conservación de la Vida Silvestre de San Juan de Aragón para hacer compañía a la elefanta africana Ely , como parte de las recomendaciones de especialistas en fauna silvestre nacionales y extranjeros, para promover el acoplamiento de estas dos elefantas africanas en pro de su bienestar, informó la Secretaría del Medio Ambiente (Sedema) de la Ciudad de México.
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“Hoy recibimos a una hembra de elefante africano, Gipsy, procedente del Centro de Conservación Zoofari, ubicado en el estado de Morelos. Con el apoyo de Zoofari, Africam Safari, la Asociación de Zoológicos, Criaderos y Acuarios de México y otras instituciones estamos viendo por la salud y bienestar de los ejemplares de fauna silvestre que habitan en los Zoológicos y Centros de Conservación de México”, sostuvo Fernando Gual Sill, director General de Zoológicos y Conservación de la Fauna Silvestre de la Sedema.
El médico veterinario zootecnista y también maestro en ciencias de la salud en fauna silvestre destacó que como parte de un dictamen de la situación de Ely por parte de expertos en elefantes, se generaron diversas recomendaciones incluyendo la necesidad de una ampliación del albergue de Ely – que se construyó el año pasado–, y la posibilidad de trasladar a otro elefante africano a San Juan de Aragón, con características similares a las de Ely.
“La conservación tiene muchas herramientas y una de ellas es la coolaboración entre instituciones, en este caso se decidió que lo mejor para el bienestar y salud de Ely era trasladar a otra elefanta africana, procedente del Centro de Conservación Zoofari, que tiene aproximadamente la misma edad y es posible que se hayan conocido cuando eran pequeñas, cuando fueron trasladadas a México, o en alguno de los circos, ya que ambas elefantas vivieron la mayor parte de sus vidas en circos”, abundó Gual Sill.
Preparación para el traslado
La Sedema indicó que después de algunas semanas de condicionamiento de la elefanta Gipsy para entrar y salir del contenedor especial, utilizado para el traslado de elefantes, y habituarse al mismo, un grupo de expertos en manejo y traslado de fauna silvestre y el propio equipo del Centro de Conservación Zoofari llevaron a cabo el manejo de Gipsy, desde la entrada al contenedor de manera voluntaria, hasta su traslado por carretera, que estuvo apoyado por elementos de seguridad ciudadana de Morelos y de la Ciudad de México.
“Posterior al traslado por carretera y después de varias horas logramos que Gipsy se sintiera tranquila para bajarse del contenedor. Todo el personal del Zoofari se abocó a este traslado y con el apoyo del personal del Zoológico de San Juan de Aragón se logró que Gipsy esté en su nuevo hábitat y poco a poco se llevará a cabo el proceso de acoplamiento con la elefanta Ely”, mencionó Fernando Gual.
El equipo del Centro de Conservación de San Juan de Aragón, en coordinación con un grupo de especialistas en comportamiento animal, mantendrán en observación permanente a Gipsy y a Ely.
“Estaremos muy al pendiente en las siguientes semanas para observar cómo se van acoplando, será un trabajo de equipo por parte de los cuidadores de las elefantas, biólogos, veterinarios y de todas las instituciones que nos están apoyando en pro de la salud y bienestar de los elefantes de San Juan de Aragón”, agregó.
Por su parte, Marcos Oteiza Gajón, director General del Centro de Conservación Zoofari, destacó que este movimiento se hizo pensando en en Gipsy y Ely, y todos los elefantes que hay en el país bajo cuidado de profesionales en vida silvestre, “es muy importante conservar a esta especie porque está desapareciendo a pasos acelerados en vida silvestre y puede ser el último bastión para conservarla”.
“Estamos muy contentos, aunque con sentimientos encontrados porque Gipsy forma parte de nuestra familia, tiene un lugar muy especial en nuestro corazón, pero sé que Gipsy está en las mejores manos a partir de hoy”.
Analizaron conductas
Marilú Alonso Spilsbury, médica veterinaria especialista en comportamiento animal egresada de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM), explicó que previo a la salida de Gipsy hacia la Ciudad de México se hizo un estudio para obtener el perfil de las conductas que tienen cada una de ellas.
“Saqué el repertorio de conductas de Ely con y sin visitantes para calcular, como etóloga, lo que llamamos los presupuestos del tiempo, es decir, a qué dedica el tiempo cada uno de los ejemplares y tuve la oportunidad de estar en el Zoofari para hacer el mismo estudio con Gipsy, es muy posible que una le enseñe a la otra parte del repertorio conductual que tiene”, explicó.
Derivado de su estudio consideró que “a Ely le va a cambiar la vida el hecho de tener una compañía de una hembra que se le parece mucho en peso, tamaño, edad, incluso cabe la posibilidad de que se hayan conocido desde antes en un circo y el reencuentro es a favor de ellas. No sólo gana Ely, ganan las dos, es para bien de las dos”.
Salvar a los elefantes del país
Frank Carlos Camacho Wardle, especialista en elefantes y director General de Africam Safari, recordó que a nivel mundial el elefante africano atraviesa una condición preocupante al entrar a la lista roja de especies amenazadas de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN), por lo que la labor de los zoológicos contribuye a su conservación, ya que a partir de este primer traslado comenzarán a trabajar en colaboración para mejorar las condiciones de otros elefantes del país, y de ser posible, reproducirlos.
“Los elefantes están en riesgo, en amenaza de extinguirse en breve si no se hace algo al respecto, tanto en la naturaleza como bajo cuidado humano, y trabajar en coolaboración entre zoológicos, autoridades, la academia, nos hace tener decisiones muy sólidas, robustas, muy consensuadas, con mucha ciencia, basados en el bienestar y en la mejora de la vida de los animales”, consideró.
Por ello, sostuvo que este movimiento beneficia a Ely y todos los elefantes del país ya que “afortunadamente en México hay un grupo reproductivo muy importante y estamos trabajando en forma colaborativa con otras instituciones para salvar a los elefantes. Esto permite que haya espacio en otras instituciones para que reciban animales reproductores y podamos salvar a esta especie tan icónica e importante”.
La Sedema aseguró que el recinto de Ely y Gipsy, incluyendo ahora la ampliación construida el año pasado, tiene una superficie que representa más de 10 veces lo estipulado en estándares internacionales para un elefante.
El recinto cuenta con una charca de agua en donde tendrán la oportunidad de bañarse y refrescarse, casas de noche donde descansarán cuando así lo decidan, charcas de lodo para que puedan llenarse de tierra, además de troncos, termiteros, dispensadores de alimento, entre muchos otros elementos que forman parte del programa de enriquecimiento ambiental que promueve la salud y bienestar de las elefantas africanas Ely y Gipsy, que habitan en el centro de conservación de fauna silvestre de San Juan de Aragón.
VMS