Estudiantes de diferentes preparatorias de la Universidad de Guadalajara resultaron intoxicados con alcohol adulterado durante una fiesta clandestina de bienvenida a la que acudieron un aproximado de 2 mil personas y misma que fue clausurada por personal de permisos del ayuntamiento de Guadalajara.
La fiesta se llevó a cabo el sábado en la noche en el domicilio de Joaquín Romero 720 al cruce de la calle Esmeralda, en la colonia Huentitán el Alto de Guadalajara.
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Ahí fue donde llegaron elementos de la policía municipal de Guadalajara debido a que recibieron varios reportes de que se llevaba a cabo una fiesta masiva así como también culminó en una riña campal tras la intoxicación de varios jóvenes con alcohol adulterado.
Elementos de los servicios médicos municipales acudieron al lugar, pero les mencionarón los policías que no les permitieron el ingreso para verificar las personas intoxicadas.
Se estima que había entre mil 500 y 2 mil menores de edad que llevaban a cabo una fiesta de bienvenida en el inmueble a nuevos estudiantes de preparatoria los cuales se empezaron a irse después de ver a la policía.
Personal de inspección y vigilancia levantaron un acta por no contar con licencia además por la venta de cerveza menores de edad, por lo anterior se realizó la clausura del establecimiento.
Se menciona la policía municipal que los menores habrían pagado 70 pesos como cover para ingresar al lugar, además de 50 pesos de descorche y la venta de cerveza al interior del inmueble.
Por el momento no se ha confirmado por parte de la autoridad que hubiera personas intoxicadas o la presencia de estupefacientes.
JMH