Al tener como ejes la recuperación de espacios, la vinculación y fortalecimiento del tejido social, mejoramiento en calidad de vida, así como la visibilización de pueblos indígenas de la capital, "Ciudad Mural" se presenta como un proyecto de intervención urbana con murales en las juntas auxiliares de La Resurrección y Azumiatla; así como la Unidad Habitacional La Margarita, cuya mecánica consistió en que artistas visuales se adentraran a las localidades, conocieran las historias de sus habitantes y las trasladaran en los muros.
El proyecto, derivado de la alianza entre la Secretaría de Cultura federal, el Instituto Municipal de Arte y Cultura (Imacp), el programa "Por un México Bien Hecho", de Comex; y el Colectivo Tomate, consiste en 95 murales que se presentarán del 30 de agosto al 1 de septiembre, en las comunidades señaladas.
En conferencia de prensa, Maribel Benítez, directora del Colectivo Tomate, explicó que este proyecto, que tiene como antecedente la intervención en el Barrio de Xanenetla, busca fortalecer el tejido social entre los habitantes de las comunidades.
"El objetivo común en esta alianza es transformar el entorno de las personas con las que colaboramos, fortalecer sus capacidades autogestivas y trabajar por el mejoramiento de su calidad de vida (...) 'Ciudad Mural' es el proyecto que hemos cosechado en varios estados del país, que conecta a la sociedad con el arte y va con la participación ciudadana", señaló.
En su intervención, Salvador García, integrante del Colectivo Tomate, especificó que durante 20 días, 3 mil 750 metros cuadrados fueron intervenidos, lo que requirió de mil 566 litros de pintura y 900 aerosoles. Por ello, se contó con la participación de 42 artistas, de los cuales 23 fungieron como “Kauyumaris”, es decir, creadores que cuentan con experiencia en este tipo de intervenciones, no obstante, resaltó el trabajo previo en las zonas para poder ingresar.
En ese sentido, resaltó los conciertos, las presentaciones de teatro y talleres en el que participaron habitantes, quienes expresaron su sentir por radicar en dichas localidades.
Sobre el proceso dentro de las comunidades, García expuso que consistió en el diálogo con los habitantes, residentes originarios y cronistas, lo cual permitió el reconocimiento de su identidad e historia. Por ello, explicó que el proyecto busca lograr un cambio que impacte de forma positiva la convivencia en los pobladores para disminuir las problemáticas sociales.
"Los artistas se tienen que adentrar en el barrio, convivir con las familias, conocer el entorno, platicar con los cronistas (...) Trabajamos en tres comunidades. En cada una encontramos diferentes historias, por ejemplo, en La Resurrección se mantiene un sentido de resistencia histórica, de sus raíces indígenas, pues hay hablantes de náhuatl. La Margarita siente orgullo por sus raíces, los obreros, tienen arraigada su identidad; mientras, en Azumiatla, se trata de una comunidad campesina que tiene incertidumbre por ser tragada en la ciudad, se trata de una localidad en resistencia", señaló.
Mientras, Mai Hernández, directora de Operaciones del programa "Por un México Bien Hecho", de Comex, resaltó que la intervención de estos espacios ha tenido un impacto social favorable, pues de acuerdo con sus estadísticas, el 86 por ciento de los habitantes ha reconocido ser agente para resolver problemáticas en conjunto, lo que deriva en el cuidado de su entorno, rescate de sus comunidad y preservación del patrimonio.
Asimismo, Miguel Ángel Andrade, director del Imacp, resaltó la alianza entre las autoridades de gobierno a nivel municipal y federal, la iniciativa privada y colectivos, lo cual permitió dar continuidad a uno de los objetivos de la dependencia, el cual consiste en la descentralización de la cultura del Centro Histórico.
"La intervención de estos espacios se hace como una deuda histórica, de descentralizar las actividades culturales del Centro Histórico (...) Ahora, la historia es contada por las comunidades; es necesario trasladar la historia de las personas a las paredes que habitan", dijo.
Además, comentó que las localidades fueron elegidas tras un análisis ante la urgencia de realizar acciones para recuperar el tejido social, así como por la riqueza de sus tradiciones e historia, como eje transversal para crear comunidades.
Andrade puntualizó que la dependencia mantendrá el trabajo con los sitios y sus residentes, pues los cambios en la imagen urbana implican un trabajo permanente de las autoridades. Por último, dio a conocer que el proyecto contó con un recurso de 2.5 millones de pesos por parte de la Secretaría de Cultura, así como 1.3 millones de pesos por el Imacp; 900 mil pesos (400 mil pesos en efectivo) de la empresa Comex.
MITM