Haitianos no se rinden y se unen a la vida comercial en Monterrey

Los migrantes haitianos, que llegaron desde hace meses a la región, comenzaron a participar en la vida comercial de la ciudad.

Calcetines, cubrebocas, artículos de temporada... Ellos se adaptan y buscan opciones de vida. Jorge López
Orlando Maldonado
Monterrey /

Los migrantes haitianos que llegaron desde hace meses a Monterrey comenzaron a participar en la vida comercial de la ciudad, pues ayer se pudo ver a algunos de ellos vendiendo mercancía en la zona de Colegio Civil y 15 de Mayo.

Desde cubrebocas hasta calcetines son los productos que los haitianos ofrecieron en los puestos, asesorados siempre por regiomontanos, dueños de los locales, quienes entraban al quite si había problemas de comunicación entre vendedor y clientes.

Buenas tardes, ¿qué precio tienen los cubrebocas?

“Dos por 50, amigo, traen 50 cubrebocas cada caja”.

Para adaptarse a las costumbres locales, algunos hasta se animaban a gritar "¡Páseleeeeeee!", tal cual lo hacen los comerciantes regiomontanos.

Ya cuando se comenzó a batallar para comunicarse en español, entró la encargada del puesto que es de Monterrey.

"Son de Haití, llegaron hace cinco meses aquí a trabajar. Ellos vinieron a pedirnos trabajo, ya sabe hablar un poco español, ya aprendió", dijo la dueña de uno de los locales.

En otro de los puestos, Henry también dijo ser de Haití, y como tantos de sus compatriotas se fue primero a Chile y de ahí emprendió su camino hacia México.

En su caso, resaltó que sus papás están en Estados Unidos, pero quiere permanecer por un tiempo en Nuevo León debido a los peligros de la frontera.

"Tres por 25 los calcetines que te gusten, los puedes combinar si quieres. Hay para hombre, niño, dama... no sé qué es lo que te guste", ofreció.

"Más o menos hablo español, soy de Haití, ya tengo casi un mes aquí, pero antes vivía en Chile y me vine para acá. Aquí sí me pagan bien, voy para Estados Unidos porque mi papi está allá, (aunque) me voy a esperar porque ahora está muy peligrosa la frontera", relató.

En el recorrido de la plataforma MILENIO-Multimedios también se constató la presencia de un dominicano vendiendo sudaderas, pero no aclaró si su destino era llegar a los Estados Unidos o permanecer en Nuevo León.

"Soy de República Dominicana".

¿Y te quedaste aquí?

"Simón".

Así, los migrantes que están en la entidad se abren paso día a día, muchos de ellos anhelando llegar a Estados Unidos y muchos otros quedarse y trabajar.


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