Ubicada en la Dolores Hidalgo conocida también como Cuna de la independencia se ubica la Parroquia de Dolores, lugar donde según referencias históricas Miguel Hidalgo convocó al pueblo a iniciar la lucha por un México libre.
"Podemos decir con toda seguridad que es el altar de nuestra patria, porque es aquí donde el cura hidalgo arengó al pueblo la madrugada del 16 de septiembre”, explicó José Alamilla Ríos, historiador.
Señaló que la parroquia de Dolores cumplió en este 2020, 302 años de existencia y justo el 15 de septiembre es la celebración de la virgen en el Pueblo Mágico de Dolores Hidalgo, misma que ha sido festejada cada año el último domingo de septiembre, ya que los ciudadanos decidieron dar festejo tanto al aniversario de independencia, como al de la Virgen de Dolores.
Fue la madrugada del 16 de septiembre de 1810, cuando el Cura Miguel Hidalgo acudió a la Parroquia de la Virgen de los Dolores, para dar el grito del inicio de la lucha por la independencia nacional, la cual culminaría 11 años más tarde.
La parroquia fue construida en el siglo XVIII, por pobladores de Dolores, con la dirección de sacerdotes que llegaron al pueblo, el diseño que tiene es de estilo barroco y el cura Hidalgo llegó a fungir como tal en el año de 1803, por lo que más de 6 años estuvo evangelizando en la ciudad, enseñando diferentes oficios a las personas, entre ellos la alfarería.
La estructura cuenta con un atrio que permite la concentración de personas a las afueras del lugar y todo tipo de eventos religiosos se llevan a cabo en dicho establecimiento, como bodas, XV años, Bautizos, entre otros actos eucarísticos.
Personas de otras partes de la república y el mundo entero acuden a visitar dolores, resaltando que la parroquia de Dolores es la más importante de la patria.
"En mi caso me transporto al pasado, el pasado que es importante, cómo estuvieron las cosas ya que yo no estuve en ese tiempo es importante recordar cómo estuvo todo ese movimiento y que aquí inició prácticamente", Comentó Leobardo Calderón, visitante de la parroquia.
Con un ejército liberado de los calabozos de la cárcel del pueblo, el ahora Museo de la Independencia, comenzaba a establecerse la primera generación de los insurgentes, a quienes el Cura Hidalgo les liberó de su prisión y les pidió que lo siguieran en su lucha, así lo relata el Cronista José Alamilla Ríos.
"Llegó el momento de nuestra emancipación, ha sonado la hora de nuestra libertad y si conocéis su gran valor me ayudarais a defenderla de la garra ambiciosa de los tiranos" fue así como el Cura Hidalgo se puso al frente de su ejército y reforzó el acto, indicando que dicha causa era Santa y que Dios la defendería.