El 13 de noviembre de 2018 después de comparecer ante la Comisión de Seguridad Ciudadana y Justicia del Congreso, el procurador del estado de Hidalgo, Raúl Arroyo González, reconoció que no había una cifra oficial de personas desaparecidas en la entidad y al mismo tiempo daba a conocer la posibilidad de crear el proyecto que llamó en un inicio cementerio forense para que el depósito de cadáveres del Servicio Médico Forense (Semefo) de Pachuca no se viera rebasado.
En esa fecha, de acuerdo con el fiscal, el depósito de cadáveres contaba con poco más de 60 cuerpos, un espacio que fue inaugurado en enero de 2000.
Arroyo González reconoció que los espacios para cadáveres en Hidalgo están superados; once meses después, en octubre de 2019, en una reserva territorial de dos hectáreas en el municipio San Agustín Tlaxiaca, en las faldas de un cerro desde donde se domina la ex Hacienda de la Concepción, comenzó a construirse el Centro de Identificación Humana.
Raúl Arroyo afirma que el Centro de Identificación Humana que se construyó a veinte minutos de la ciudad de Pachuca, es un sitio de fácil acceso, con las condiciones climáticas favorables, no se afecta al medio ambiente, y es un espacio digno y no alejado de la zona urbana.
Subraya que el objetivo del proyecto es estar en la misma frecuencia de búsqueda de personas desaparecidas y asegura que esa es una prioridad.
“En este sitio se van a depositar de una manera digna, segura y salubre los cuerpos y restos humanos que no estén identificados para asegurar su preservación con el propósito de identificarlos con el uso de la tecnología y las víctimas de personas desaparecidas encuentren a sus familiares y también servirá para las investigaciones, es decir, en el caso de que haya un delito que se siga persiguiendo”, explica.
El procurador dice que se está en construyendo y ya está en pruebas una plataforma digital que funcionará en el Centro de Control, Comando, Comunicaciones, Cómputo, Calidad e Inteligencia (C5i) de la Secretaría de Seguridad Pública de Hidalgo con información de los cuerpos del Centro de Identificación Humana.
Precisa que en la plataforma, la cual será pública, se tendrá información genética de los cuerpos y los elementos suficientes para quien esté realizando una búsqueda de una persona desaparecida y en dado caso pueda ser identificada.
El lunes 13 de julio de este año, el gobierno federal, a través de la Secretaría de Gobernación, dio a conocer que del 15 de marzo de 1964 a la fecha hay 73 mil 317 personas desaparecidas y no localizadas en el país. En Hidalgo la cifra oficial de personas desaparecidas es de 414.
Tiradero de cadáveres
Para la coordinadora del Consejo Ciudadano de la Comisión de Búsqueda de Personas del Estado de Hidalgo, Ana Lara Vargas, el Centro de Identificación Humana no solo será de ayuda para quienes buscan a sus familiares en la entidad sino también para las víctimas de otros estados.
“Es muy relevante porque sí han quedado muchos cuerpos sin identificación y no son todos de Hidalgo, esto va a permitir que al tener todos los datos de identificación no se pierdan y con la colaboración de otras instancias se puedan reconocer cuerpos que no son precisamente del estado sino de otras entidades”, dice.
Lara Vargas menciona que Hidalgo se ha convertido en el tiradero de cadáveres del Estado de México pues se han encontrado cuerpos sin identificar en municipios como Nopala de Villagrán, Huichapan, Zempoala, Ixmiquilpan, Tepeapulco y Tula.
Asegura que este Centro es un avance a nivel nacional pues se hará el cruce de la información genética de los cuerpos no identificados con familiares y saber si se trata de la persona que se está buscando.
Sin contaminación
Tras iniciar su construcción en octubre del 2019, la Procuraduría concluyó ya la primera etapa del Centro de Identificación en la cual se invirtieron 6.5 millones de pesos del Fondo de Aportaciones para la Seguridad Pública.
Con estos recursos se edificó la barda perimetral del lugar, cuenta con un caseta de vigilancia en el acceso principal, un área administrativa, tres bloques de nichos para 180 cuerpos, un espacio para la recepción y entrega de cuerpos, andadores así como una “osteoteca” para los restos humanos.
De la primera etapa aún hace falta el colocar las puertas herméticas a los nichos, los cuales cuentan con tubos para los desechos líquidos que generen los cuerpos.
“Nos falta una parte que es el cierre de los nichos porque estamos buscando que sea con tecnología moderna que evita la emanación de gases”, precisa el fiscal.
Asegura que el Centro no va a contaminar el medio ambiente del lugar pues para los desechos líquidos que generen los cuerpos en los nichos se construirá una planta tratadora de aguas.
En agosto de este año se hará la licitación de la segunda etapa del proyecto la cual consta de una planta tratadora de aguas residuales, una cámara de gases y bardeado perimetral para la ampliación del terreno.
Para esta segunda etapa se requieren 3.5 millones de pesos, los cuales se están gestionando a través de la Procuraduría también del Fondo de Aportaciones para la Seguridad Pública y se prevé que concluya a principios del 2021.
La criminóloga y coordinadora en Hidalgo de la Sociedad Mexicana Forense, Karina Rodríguez Martínez, celebró la construcción del Centro y que los cuerpos tengan un trato digno para la identificación de los familiares.
“Va a ayudar mucho también para esclarecer hechos delictivos y los ayudará la plataforma digital que se implementará en el C5i, desde nuestra perspectiva nosotros lo vemos muy bien”, dice.
Menciona que en el país los estados de Morelos, Jalisco y Tamaulipas tienen ya un panteón forense. “Son los estados que cuentan con mayores índices delictivos y criminales, desapariciones y todo lo que en Hidalgo también ya se ha visto, apenas a inicios de este año encontraron restos óseos en una comunidad de Huejutla”, dice.
De acuerdo con la Procuraduría también en Guerrero y el Estado de México cuentan con un panteón forense.
“Con el Centro de Identificación Humana la víctimas pueden identificar en los cuerpos y restos si son o no sus familiares”, agrega Karina Rodríguez.
Depósito de cadáveres
El procurador dice que los 129 cuerpos y los restos del depósito de cadáveres del Servicio Médico Forense de Pachuca, adscrito a la Dirección General de Servicios Periciales de la Fiscalía, se trasladarán al Centro de Identificación Humana y que será esta Dirección la que lo opere.
Así, se llevarán al nuevo inmueble 82 cuerpos masculinos, 18 femeninos, 23 fetos o productos en término y seis segmentos corporales. Estos cuerpos datan del 2005 a la fecha en el depósito del Semefo de la capital el cual será cerrado una vez realizado el cambio. Serán trasladados con información genética y con un expediente cada uno.
Arroyo González dice que los cuerpos que sean reconocidos serán entregados a sus familiares y los que no sean identificados permanecerán en el lugar hasta que sean reclamados por alguien.
Enfatiza que con el Centro se va a resolver el problema que se tiene de almacenamiento rebasado en el depósito del Semefo de Pachuca.
“Afortunadamente aún y cuando es un edificio que ya dio de sí todo lo que tenía nos ha permitido un tratamiento digno, un manejo sanitario sin riesgos pero no podemos estar arriesgando a que un día ya materialmente sea imposible”, dice.
-¿Entonces el depósito del Semefo de Pachuca ya está rebasado?
-Sí, está rebasado porque es un depósito que no se pensó para depositar 100 cadáveres. Cuando se hizo se pensó en una expectativa quizá muy adelantada de 50 cuerpos y el crecimiento fue lento, había 20, 25, 30. Hoy tenemos poco más de 100 y si la tasa siguiera creciendo entonces sí nos veríamos en riesgo de un almacenamiento totalmente rebasado.
-¿Cuándo comenzará a operar el Centro de Identificación Humana?
-Queremos que eso sí funcione ya, que ya funcione en los próximos meses, quizá en un par de meses, nada más que tengamos resuelto el problema del cierre de los nichos porque tenemos ahí que hacer una inversión, quizá eso nos retrase un poco, pero lo básico, lo fundamental, está listo para que pueda funcionar.
-¿Sería en septiembre entonces cuando opere?
-Ojalá que pudiéramos hacerlo en septiembre.