La Arquidiócesis Primada de México agradeció a los fieles de la Virgen de Guadalupe por mantenerse en casa y no asistir a la Basílica durante las fiestas del 12 de diciembre.
En su editorial del semanario Desde la Fe, la iglesia señaló que la actuación de los peregrinos fue un claro gesto de amor a la sociedad. Señalaron que el hecho de abstenerse de peregrinar al Tepeyac, pone un enorme ejemplo de lo que México necesita en este momento.
Señalaron que suspender los festejos presenciales en la Basílica fue una decisión difícil, pero que encontró su motivación en la generosidad, el amor al prójimo, la premisa de “yo me cuido y yo te cuido”, y en la certeza de que en esta ocasión la Virgen visitó a sus fieles en sus casas.
También agradecieron a los sacerdotes, religiosos, religiosas, agentes de pastoral y laicos comprometidos que colaboraron para ser parte de este ejemplo de acción responsable a nivel mundial. además de señalar el apoyo de la Conferencia del Episcopado Mexicano, al Consejo Episcopal Latinoamericano, a la Conferencia de los Obispos Católicos de Estados Unidos, y a cada una de las diócesis del país, por unir esfuerzos y mostrar a una Iglesia sólida y unida.
Por lo que hicieron el llamado a los fieles a salir de sus hogares solo si es necesario, evitar aglomeraciones y a celebrar las fiestas decembrinas de formas creativas y alegres, evitando las reuniones masivas.
JLMR