Debido a la pandemia, las y los adultos mayores no solo se han visto vulnerables por ser uno de los sectores con mayor riesgo de contagio de covid-19, sino también por el confinamiento con el que deben de vivir, y es por ello que profesores que daban clases presenciales en el Instituto Nacional de las Personas Adultas Mayores (Inapam), en Pachuca, continúan ofreciendo clases por Zoom.
A pesar del entusiasmo de muchos de las y los que participaban de forma activa en clases de Tai Chi o que conformaban el Coro Inapam, éste ha decaído porque no están familiarizados con el uso de la tecnología, lo cual dificulta que sean parte de estas actividades.
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En el caso de Sara Lozano Paredes, una adulta mayor de 73 años quien logró mejorar su salud gracias a la práctica del Tai Chi y quien antes de la pandemia ofrecía sus cursos a 120 alumnos, ahora imparte la disciplina de manera remota, por lo que ha logrado que 25 personas sean parte de esta nueva modalidad para impartir su taller.
“Viendo las circunstancias que no podíamos salir y que las personas ya estaban acostumbradas a realizar su ejercicio, un día me decidí por impartir el taller a distancia porque es necesario para la y el adulto mayor que se continúe ejercitando, sino el cuerpo se atrofia.
“En agosto inicié con los talleres en línea y es un aliento para todas y todos, porque se levantan todos los días con el entusiasmo de que deben estar en su clase, es un aliciente, y aunque no los puedo ver y corregir la postura, trato de ser lo más explícita posible para que muevan su cuerpo”, expuso Lozano Paredes.
En esta línea, dijo que ha sido de ayuda el que familiares de las y los participantes que apoyan la conexión para que continúen la disciplina.
“Tengo un grupo al que les doy clases los martes y los jueves, de 9:00 a 10:00 de la mañana y estoy conformando otro para miércoles y viernes de 9:30 a 10:30 de la mañana”, explicó.
Por su parte, Neftalí López Ortiz, profesor de guitarra y quien conformó el Coro Inapam, señala que la falta de dominio de la tecnología ha provocado que una parte de quienes integran el coro no participen en él, “porque no todos le entienden al manejo de un celular, la tecnología es nueva para ellas y ellos, les causa dificultades.
“Algunos son apoyados por familiares, su hijos o nietos, por lo que esperamos que se vayan sumando más en los próximos días, queremos a nuestro coro de 25 personas, como antes de la pandemia, ahora solo son siete”, expuso.
Es por ello que hizo un llamado a los familiares de las y los adultos mayores a que los apoyen para que puedan ingresar a las clases virtuales, mismas que tienen un costo que no rebasa los 20 pesos, ya que esto servirá para que tengan actividades y eviten situaciones que afecten el estado de salud físico y mental de estas personas.