En un recorrido realizado por Milenio en las calles del centro de León, se pudo notar un incremento importante en el uso de cubrebocas, sobre todo en personas de la tercera edad y menores. Con la entrada de la Fase 3 de la contingencia por covid-19, parece ser que la población comienza a tomar conciencia de la importancia de la prevención.
Desde el pasado 12 de abril, el gobierno municipal de León anunció mediante un comunicado que como una medida más de prevención ante el creciente contagio del covid-19, sería obligatorio el uso de cubrebocas para los ciudadanos que transiten en los espacios públicos.
Incluso se observan choferes de autobús, automóvil, motocicleta y bicicleta utilizando sus respectivos cubrebocas. De igual forma la indicación fue para los usuarios del transporte público.
Sin embargo, hasta este 22 de abril, en las calles se observaban muy pocas personas portándolos, incluso a pesar de que en el transporte público se repartieron hasta 11 mil cubrebocas.
Contraste en las calles
Durante este recorrido se pudieron observar contrastes incluso entre calles de las mismas zonas. La Calzada desde el Malecón Río de los Gómez y la calle Francisco I. Madero hasta su tope con el Centro Histórico de la ciudad, mantiene aproximadamente un 90 por ciento de los negocios cerrados.
Solo se mantienen abiertos algunos negocios de ropa, papelerías y barberías, pues todos los restaurantes y bares que caracterizan dicha calle cerraron sus puertas desde hace semanas. Por lo tanto, son escasos los transeúntes de la zona.
Sin embargo, calles como 5 de Mayo, Hermanos Aldama y Pedro Moreno aún contemplan una gran cantidad de peatones, por lo que los negocios aún de giros no esenciales se mantienen abiertos. De igual forma, se ubican muchos establecimientos de servicio y bancos, por lo que suelen ser zonas más aglomeradas.
En cuanto a los paraderos del Sistema Integral de Transporte, se observan cada vez más vacíos. El alcalde de León, Héctor López Santillana informó que desde la petición de cerrar negocios no esenciales, los viajes del SIT se redujeron hasta en un 40 por ciento.