Cuenta una leyenda maya que antiguamente los colibríes eran considerados los mensajeros de los dioses, de esta manera, si alguien se encontraba en algún momento con el ave, era porque esta le traía señales de alguien querido; hoy representan a esos que premiados, regresan en forma de preciosas aves de ricos plumajes y nos recuerdan que el amor y la esperanza son posibles al decir sí a la vida.
En el 2018 se inauguró el 'Jardín de la Vida', en la ciudad de León, el cual se encuentra dentro de las instalaciones del Centro Estatal de Trasplantes de Guanajuato, y en donde se rinde un especial homenaje a la memoria de los héroes donadores de órganos; en este, habitan además colibríes y aves de la región, símbolo en la entidad de los donantes.
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"Hace dos años surge la idea de hacer un 'Jardín de la Vida' en homenaje a todos estos donadores de órganos que han salvado vidas; colocamos flores, incluso algunas de ellas han sido donadas por las familias de los donadores o incluso de los receptores, aquellos que recibieron estos órganos y han traído estas plantitas y las hemos sembrado aquí en este jardín... además se colocaron bebederos parea atraer a los colibríes y a partir de que se dio la inauguración han estado llegando más colibríes, y algunos petirrojos", señaló la Dra. Miriam Mujica Laerra, coordinadora de Investigación Clínica en Centro Estatal de Trasplantes
Guanajuato es hoy por hoy líder en materia de donación de órganos a nivel nacional, teniendo actualmente una tasa de 14 donadores por cada millón de habitantes, en contraste de la tasa media que es de 4 en todo el país, catapultando así a la entidad con su estrategia de promoción de la donación de órganos, misma que ha servido de ejemplo en diversos estados y reconocida recientemente por el propio Hugo López Gatell, subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud.
A las familias de los donadores se les entrega una medalla con un colibrí forjado y un banderín que se coloca en el féretro a manera de reconocimiento por decir sí a la vida, conmemorando con esta a todos quienes han contribuido a salvar vidas.
"Para nosotros el jardín también representa eso, 'la semilla'... cuando una persona muere, lo entierran y cuando llega alguien a la tierra, si da fruto florece... entonces ¿Qué hace un donador? muere, pero vuelve a florecer en la vida de otra persona más; es también parte de dar la vida, y una flor, una planta, es vida", mencionó Mujica.
En el espacio se encuentran flores diversas y bebederos con los que se da la bienvenida a colibríes y más aves que representan la esperanza, gratitud y amor de todas estas personas generosas, y en una placa se lee "En este jardín se honra la memoria de grandes seres humanos que al concluir su etapa terrenal dejaron un legado de vida y esperanza al donar sus órganos, haciendo de este mundo un lugar mejor".