Tiene epidermólisis bullosa o “piel de mariposa” que se denota en sus brazos, pero el joven Martín Guadalupe Constantino Contreras de 17 años, asegura que no le impide “escribir bien fuerte” y tampoco le pone freno a su deseo de estudiar una carrera universitaria.
El padecimiento, el cual genera que tenga la piel tan sensible como las alas de una mariposa desde el codo hasta sus manos, no le han impedido llevar una vida diaria; sin embargo, el desinterés de su padre por apoyarlo y una lesión de su madre, sí representa un obstáculo financiero.
“Estudio la preparatoria en el Cetmar del Fraccionamiento Los Sábalos y necesito dinero para estudiar. Mi mamá tiene quebrada una pierna y mi papá, bueno, él no me da nada. Logro estudiar de lo que me da la gente”, expuso el joven.
El delgado joven y aficionado al Club de Futbol América, reconoció que no tiene beca del municipio y tampoco del Estado, pero aseguró que ya se dio de alta para obtener la beca “Benito Juárez” que entrega el gobierno federal. “Quiero ver si me ayuda López Obrador”, expresa sonriente.
La enfermedad la tiene controlada gracias al apoyo que ha recibido por algunas empresas del puerto, pero aún su futuro es incierto porque no tiene las posibilidades económicas para solventar su educación universitaria.
“Voy a pasar a la universidad, quiero estudiar sistemas computacionales, me gusta hacer de todo en la computadora”, contó el joven altamirense que puede escribir con su mano derecha, porque la izquierda la tiene vendada, ya que tuvo un percance en bicicleta.
Indicó el menor que antes, con el apoyo de la iniciativa privada, acudía periódicamente a Monterrey a recibir tratamiento, pero ahora tiene que recibir atención médica en Ciudad Madero.
Las personas que deseen contactar a Martín pueden contactarse al número 833 390 00 75, con la señora María Flor.
ELGH