El abogado de la organización Acción Colectiva Sustentable, Gustavo Lozano, señaló que las políticas públicas en materia hidráulica han sido enfocadas con estrategias y obras paliativas que no ofrecerán una solución sustentable, que podrían acercar antes de lo previsto a Guanajuato a su Día Cero sin agua.
“Guanajuato se ubica en estas posiciones justamente por las políticas públicas que como El Zapotillo ha venido desarrollando tanto la Comisión Estatal del Agua en Guanajuato, Sapal en León y la Conagua a nivel federal, lo que ese texto (el estudio del Instituto de Recursos Mundiales) nos indica que lo que debería haber es un giro de 180 grados para intentar resolver el problema desde otras perspectivas”, expresó.
El activista reconoció que Sapal tiene un sistema exitoso de distribución de agua a sus usuarios pero no así en el método y lugares de extracción del líquido, por ello dijo que se ha planteado una gestión integral, con apoyo de herramientas e instrumentos tecnológicos que ya están en uso en otras naciones, como Israel.
“No es razonable que una ciudad como León, con lluvias como las que tenemos en cada temporada de agua se desaproveche, que simplemente se deje correr y que seamos incapaces de que con todos los recursos económicos con los que cuenta Sapal, la ciudad y el estado de Guanajuato, porque además así lo presumen las propias autoridades seamos incapaces de adquirir tecnología para aprovechar esta agua”, recalcó.
Ante ello, insistió que la racionalidad actual del recurso hídrico debe dejar de verse desde una perspectiva financiera e industrial y enfocarla hacia un aspecto ecológico, con cosecha de agua de lluvia en las viviendas leonesas, por ejemplo.
“En la Ciudad de México ya están aplicando esta tecnología, Sapal podría adquirirla junto con industriales del rango, del campo y así poder tecnificar el riego que hoy realizan, que es un riego intensivo por un riego mucho más localizado hacia la planta que va a nutrirse de esa agua como ya se realiza en Israel”, ejemplificó.