La situación del coronavirus vino a cambiarle la vida a Juan de 8 años de edad, quien ya no podría seguir con sus estudios por falta de recursos, su abuelita Micaela Ramos, comentó que tratan de ayudar en lo que se puede, pero la situación ha sido muy complicada por los pocos ingresos que llegan al hogar.
"Yo vivo aquí adelante, ha sido difícil llevar la situación, pues también mi hija es madre soltera, la apoyamos con la que podemos, pero a veces no es suficiente", dijo Micaela Ramos, abuelita de Juan.
En su situación actual, quien aportaba para la economía era el abuelito de Juan, pero desde hace un mes sufrió un pre infarto, por lo que ahora no se ha podido mover y no tienen para su rehabilitación.
"A mi esposo le dio un pre infarto y ahorita ha sido muy difícil, en cuestión a lo económico, no hemos podido darle la rehabilitación que necesita para poder estar bien, era nuestro sustento", manifestó.
Han obtenido donaciones por parte de vecinos tanto como útiles para Juan, así como una silla de ruedas para su esposo.
"Nos dieron un apoyo de una silla de ruedas prestada en lo que conseguía otra y gente nos da que una libreta, un lápiz o cosas que el niño necesita", expreso.
Por otra parte Juan ha sido apoyado por Miguel Ángel Rodríguez en la comunidad Lucero de la Pila en el municipio de Silao, sin cobrar un solo peso lo han recibido en su patio que lo adapto como salón de clases para poder continuar con sus estudios.
"Aquí por buena suerte Miguel los está apoyando en las clases, la vez pasada si fue mucho muy difícil y ahorita ya gracias a el apoyo, está cumpliendo con sus tareas, va al corriente en lo que va del ciclo escolar, de otra manera hubiera sido muy complicado, no hubiera estudiado, pero ahorita pues manda sus tareas, en la tarde se dedica más a su escuela, si lo han apoyado bastante", comentó.
La abuelita de Juan, hace mención a el proyecto de Miguel Ángel Rodríguez que no sólo ha beneficiado a su nieto, si no a muchos más niños.
"Es bueno que ellos lo hayan apoyado en este proyecto, por lo menos a mí me ha servido mucho con la situación de mi esposo y no sólo a mí, también a muchos niños del rancho" dijo.
Debido a la pandemia también despidieron a su hija del trabajo, quien está embarazada y menciona que no le dan trabajo, ahora sobrevive con trabajos de costuras que le piden a la abuelita de Juan.
Piden que sigan donando, para que más niños como Juan puedan seguir estudiando y no pierdan el ciclo escolar.