El Centro Histórico de Puebla guarda entre sus calles y casonas coloniales leyendas antiguas, algunas incluyen seres paranormales y otras a animales monstruosos que alguna vez aterrorizaron a la Angelópolis y a sus habitantes, tal es el caso de la leyenda de la Casa del Que Mató al Animal. ¿La conoces? Sigue leyendo para enterarte de qué trata.
- Te recomendamos La Casa del Diablo en Cholula, historia de su enigmático mural Comunidad
Una de las leyendas más famosas de Puebla
A un costado del zócalo de la ciudad se ubica la construcción protagonista de una de las leyendas más famosas de Puebla. El número 201 de la calle 3 Oriente resguarda entre sus muros grandes hazañas ocurridas en el siglo XVI. El edificio, que actualmente pertenece al periódico Sol de Puebla, antiguamente era propiedad del señor Pedro Carvajal, un hombre de grandes riquezas y buena posición.
Don Pedro, que recientemente había perdido a su esposa, tenía dos hijos que eran su bien más preciado; Fernando de 6 años y Teodora de16 años. Se cuenta que la heredera de Don Pedro poseía una belleza incomparable que hacía suspirar a todos los hombres nobles que la rodeaban.
La vida transcurría con normalidad en la Puebla colonial hasta que un día comenzó a circular el rumor de que en la ciudad rondaba un animal que paralizaba a la gente para después devorarla. Algunos dicen que se trataba de una gran serpiente, mientras que otros decían que era un coyote gigante. Aunque no se establece la especie de animal, lo cierto es que los poblanos estaban aterrorizados.
Una terrible desgracia y un soldado valiente
La leyenda cuenta que una fatídica noche, el monstruoso animal se desplazó hasta la casa de Don Pedro y sin mucho esfuerzo entró al cuarto del pequeño Fernando para devorarlo. Esto causó la ira del padre, quien ofreció como recompensa la mano de su hija a quien le diera muerte a la bestia que había devorado a su amado hijo.
Muchos hombres valientes lo intentaron pero murieron en el intento, fue cuando entonces llegó el enamorado secreto de Teodora, un soldado de clase baja quien demostró su habilidad en el manejo de las armas y le cortó la cabeza al monstruo, la cual llevó como ofrenda a Don Pedro Carvajal.
Tras el acto de valentía, el joven fue nombrado noble por el mismo Virrey de la Nueva España; Don Pedro le concedió la mano de su hija y la ciudad de Puebla pudo descansar tranquila sabiendo que el monstruoso animal ahora era sólo un mal recuerdo.
Aún con el paso del tiempo, la Casa del que Mató al Animal conserva intacta su fachada de estilo gótico que orgullosa muestra en su portada escenas talladas de cacerías.
mpl