Docentes que siguen en activo y maestros jubilados cansados de no tener una atención de calidad, denuncian que la Clínica de la Sección 50 del Sindicato de Trabajadores de la Educación (SNTE) está abandonando a sus derechohabientes en Nuevo León.
Deficiencia que llega al grado de afectar directamente a pacientes con enfermedades crónicas, quienes no cuentan con el acceso a su tratamiento de forma inmediata.
Mujeres y hombres que padecen problemas renales son los más afectados, ya que desde hace unas semanas no han recibido las hemodiálisis que requieren.
Uno de los afectados, llamado Jorge, quien pidió se omitieran sus apellidos, relató para MILENIO que recibe este tratamiento de forma incompleta, deteriorando así su salud.
“Nos están disminuyendo las horas de hemodiálisis, antes eran seis, pero ahora muy apenas nos alcanzan a dar dos horas a lo mucho, o en su caso ninguna, aunque nos quejemos, lo único que nos dicen que eso se trata por problemas de las máquinas, lo que no ven es que nos están matando así”, expresó el docente jubilado.
Tras alzar la voz en múltiples ocasiones, maestros exigieron a José Luis López Rosas, secretario general de la Sección 50 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), dar solución a las problemáticas que hay en el servicio de salud que les están recibiendo.
Un grupo de maestros presentó este oficio que está respaldado por los pacientes con insuficiencia renal que se han visto afectados por la falta de hemodiálisis y tratamientos dignos.
“Las personas que firmamos este oficio somos maestros, en su mayoría maestros jubilados, pensionados y algunos activos, los cuales estamos conscientes de la problemática financiera de nuestra clínica hospital, debido a la falta de aportaciones que le corresponden al gobierno del estado de Nuevo León”, señala el documento que fue dirigido a José Luis López Rosas.
De acuerdo con los pacientes de la Clínica de la Sección 50, quienes prefirieron quedar en el anonimato por temor, revelaron que las máquinas destinadas a dicho tratamiento son obsoletas, no reciben los medicamentos necesarios y además se usan bombas de agua en pésimo estado.
Los afectados por las hemodiálisis revelaron que no hay sistema de agua potable, lo que imposibilita más este servicio, el cual reciben en un área común sin las mínimas restricciones sanitarias.
“Esas máquinas son rentadas, no hay agua y para una hemodiálisis es lo más importante, nos quitaron una puerta, pese a que debemos de estar aislados, por la delicadeza de este procedimiento, ya hay mucha contaminación, nos ponen en riesgo”, expresó Lucía, docente afectada.
En redes sociales también circula un video en donde a una mujer que debían operar de la vesícula le fue negado el servicio, a consecuencia de que esta clínica no contaba con el material necesario para hacerlo.
“El año pasado yo estuve embarazada, tenía tres meses cuando me diagnosticaron piedras en la vesícula, el doctor me dijo que no me iban a operar porque no había material disponible y me tenía que esperar.
“Terminé mi embarazo aguantando el dolor, porque no cuento con los medios para hacerme la cirugía por fuera”, señala el video.
Otro de los problemas es que en la clínica ubicada en el sector de Mitras, en Monterrey, se adaptó un espacio para atender a pacientes covid, sin embargo, el área luce descuidada y no cuenta con las medidas higiénicas necesarias.
Asimismo, a pacientes que son detectados como positivos a covid les piden se atiendan directamente en el hospital Metropolitano o en sus casas, evidenciaron.
Denuncia corrupción
Esta situación ha obligado a los maestros a recurrir a servicios particulares, ya que tampoco en el Isssteleón los quieren recibir, pese a que quincenalmente les rebajan las cuotas que corresponden a este servicio, así lo mencionó Sanjuanita Guerrero, una de las maestras afectadas.
“A nosotros nos mandan a que nos atendamos aquí en esta clínica, mientras tanto el Isssteleón no nos reporta en sus informes, nos hacen a un lado por la intervención del sindicato, nos perjudica esta situación.
“Utilizan nuestras aportaciones para sus beneficios, mientras nosotros nos estamos muriendo, ahora con la pandemia se ha incrementado”, alertó Guerrero.
Falta de medicamentos, cancelación de operaciones, diagnósticos erróneos son algunos de los aspectos que sufren quienes buscan hacer válidos sus servicios médicos.