Las fallas en la construcción del nuevo hospital civil de Madero que impiden a la zona contar con mayor infraestructura de salud para enfrentar la pandemia, se debieron evitar con un director responsable de obra (DRO), pero los tres niveles de gobierno omiten esta figura obligada por la ley, señaló el Colegio de Ingenieros.
Alfredo Trejos de la Peña, presidente del organismo, dijo que otro ejemplo de esta omisión es el puente roto, obra considerada un monumento a la corrupción y que continúa sin resolverse.
- Te recomendamos Aseguradoras excluyen Dióxido de Cloro de cobertura a clientes Negocios
“La ley obliga a que los DRO supervisen tanto la obra pública como privada para que haya quien responda ante una obra mal hecha, pero nada más se exige a los particulares, los gobiernos federal, estatal o municipal no lo están aplicando en sus proyectos de construcción”.
Indicó que desde la pavimentación de una calle hasta la construcción de un edificio, todo debe ir supervisado por un DRO autorizado para evitar que colapse, pero las autoridades lo han ido omitiendo en todo el estado y las consecuencias están a la vista.
“Está por ejemplo el nuevo hospital civil de Madero, que tuvo deficiencias y eso implica más retraso y más inversión que se deberá aplicar cuando pudo haber quedado bien desde un principio y ya tendría la zona otro hospital para atender a los enfermos de coronavirus”.
El pasado 26 de septiembre, el gobierno de Tamaulipas dio a conocer que se hará un cambio en el proyecto original al haberse encontrado una obra mal hecha y con vicios ocultos, por lo que se deberá rescatar el proyecto.
- Te recomendamos Tamaulipas. Shell inicia perforación de pozos frente a Matamoros Negocios
“Hay áreas que debieron contemplarse y no se terminaron, por eso se debe hacer una nueva reingeniería y subsanar esas deficiencias, paralelo a los vicios ocultos como se menciona en términos de obra pública”, declaró entonces el gobernador Francisco Javier García Cabeza de Vaca, tras realizar un recorrido por la construcción detenida.
Trejos de la Peña apuntó que en la obra privada sí se está cumpliendo el reglamento de construcciones, pero es indispensable que en la obra pública también para evitar vicios ocultos y trabajos de mala calidad.
- Te recomendamos Tamaulipas va por Fondo Metropolitano para aterrizar proyectos regionales Comunidad
“Otro caso es el puente roto de Altamira, considerado todo un monumento a la corrupción y en donde faltó la presencia de un supervisor de obra, un DRO que comprobara la calidad de los trabajos y garantizara que se hizo bien”.
Explicó que en la obra privada, si no trae la firma de un responsable del proyecto, no se le da el permiso de construcción, sin embargo, en la pública hay omisiones que acarrean consecuencias como estas, dijo.
Comentó que hay desconocimiento de la sociedad en torno a la figura de los DRO, por lo que considera importante difundir el rol que juegan ya que su responsabilidad no es menor; no se limitan a firmar los planos.
Es por ley Se cumplieron dos años de la reforma a la Ley de Asentamientos Humanos, Ordenamiento Territorial y Desarrollo Urbano, que ordena a los municipios cumplir con la figura de los DRO, aunque estatalmente ya se contemplaba.
Alfredo Trejos indicó que existe un Reglamento de Construcciones del Estado de Tamaulipas, de julio de 2012, que regula en su artículo 1, inciso 6, el registro de los directores responsables de Obra y sus corresponsables.
“Existe todo el fundamento legal para que la obra pública no sea un peligro o un recurso mal utilizado. Toda construcción debe llevar una planeación y supervisión del proyecto en sus aspectos técnicos que solo un director responsable de obra puede dar, auxiliado por un corresponsable”.
El artículo 31 del reglamento en cuestión, establece que el DRO es la persona física que se hace responsable de la observancia de esta ley, en las obras para las que otorgue su responsiva.
El nombramiento como tal, se adquiere mediante su inscripción ante las direcciones de Obra Pública de los municipios, que determinarán la forma en que se efectuará el procedimiento para su calificación, registro y admisión, habiendo cumplido previamente con los requisitos establecidos.
“Obtiene una licencia y se integra a un padrón que le permite ver a la autoridad quiénes están vigentes y quiénes no; ellos son los que van a responder si se cae una construcción y las víctimas y daños que pudiera ocasionar, de ese tamaño es su responsabilidad, no se trata de que solo firme el plano y se vaya a dormir, hay vidas en juego”.
El organismo de profesionistas ha ofrecido a los municipios colaborar con la actualización de los directores responsables de obra, quienes deben estar debidamente capacitados para poder desarrollar su labor.
El presidente del Colegio de Ingenieros agregó que sigue siendo sólo Reynosa quien acata la disposición de tener un responsable de obra.
ICGC