Maltrato animal: alerta sobre aumento en conductas antisociales

El aumento de la violencia hacía los animales es un tema que debe preocupar a la sociedad en la zona sur, pues es una señal de alerta sobre un aumento en otros tipo de conductas antisociales que derivan en otros delitos, que comienzan con hacerle daño a una mascota, aseguran especialistas. 

Tan solo en el municipio de Tampico, 12 perritos fueron amarrados en la Laguna del Carpintero por sus propietarios, indicó el director de Protección Animal, Ángel Morales Cisneros. No se sabe si la intención era solo abandonarlos o que fueran alimento para los cocodrilos; esto último sería la única explicación de por qué fueron dejados en ese lugar. 

Por fortuna, las personas que acuden al atractivo turístico reportaron la situación a las autoridades, que fueron a rescatarlos. 

Maltrato 

Los activistas en pro de los derechos de los animales han indicado que el 70% de las mascotas que mueren en la zona sur se debe al maltrato que vivieron en manos de los que eran sus dueños. Protección Animal de Tampico ha presentado seis denuncias.

La psicóloga Martha Magdalena Rodríguez Gutiérrez, quien lidera el grupo Gemas Acciones Sororas, explicó que las personas que ejercen violencia sobre los animales carecen de empatía y no consideran los derechos a la vida y trato digno, por lo tanto no se arrepienten e, incluso, esos actos de maltrato y tortura los llegan a extender a su propia familia o a otras personas. 

“La violencia hacia los animales puede servir como detector y señal de alerta hacia la violencia intrafamiliar; recordemos que la violencia es un acto intencional con la finalidad de lastimar a otros, entonces hay una correlación entre el maltrato animal y la predisposición a la violencia social”. 

El ciclo de la violencia suele comenzar por los seres más vulnerables, que en este caso serían los animales, después niños y adultos mayores. 

Ante el Ministerio Público por este delito, solo una de ellas va muy avanzada, dijo el titular de la dependencia, Ángel Morales Cisneros, quien aseguró que es el caso de un caballo y esperan lograr judicializarlo. 

Hasta el momento la única carpeta que ha llegado con un juez de control ha sido el de 'Vaquero', un perrito que en el patio de su casa, cuando el 26 de septiembre del año pasado, uno de los vecinos del domicilio, de origen ruso, le disparó con un rifle, al parecer de diábolos. 

“El pasado 26 de septiembre de 2023 en la madrugada, nuestro vecino alcoholizado, desde su balcón y con su rifle de diábolos, disparó hacia mi casa apuntando a mis perros, un par de Shih Tzu de cuatro años de edad. Logrando asesinar a uno de ellos, mi Vaquero, Yako se salvó pero nuestro Vaquero perdió la vida de manera cruel, recibiendo un impacto que le perforó el cráneo; al momento le pedimos que detuviera al fuego pero siguió y siguió. Hicimos lo correcto; denunciamos e hicimos manifestaciones pacíficas en la Presidencia de Ciudad Madero pidiendo justicia, pedimos apoyo a los medios de comunicación, rescatistas independientes y gente animalista apoyaron amablemente. Mi familia nunca estuvo sola y el 12 de enero 2024, por fin, gracias a una orden de aprehensión que solicitamos a la Fiscalía, se obtiene la detención del agresor de origen ruso”. 

Delito no grave 

El juez de control, tras revisar las evidencias que presentó el Ministerio Público, decidió que no hubiera cárcel preventiva para el responsable, quien enfrentará el proceso en libertad; esto pasa cuando los casos no son considerados como graves. 

Además de Vaquero, otros dos perros fueron asesinados en la zona sur con crueldad en el 2023: en enero, una perrita perdió la vida, víctima de una golpiza con una escoba metálica. Los hechos tuvieron lugar en la calle Cerrada Anillas, en el Fraccionamiento Laguna Florida I, en Altamira. 

La perrita tenía seis años y el caso fue denunciado por una activista en pro de los derechos de los animales. 

En mayo murió “El Chato”, asesinado por un presunto elemento de la Guardia Estatal quien ese momento estaba destacado en Reynosa. Todo ocurrió en el centro de Tampico, cuando el perro corrió hasta la esquina donde había un puesto de tacos, que era atendido por una mujer. 

Presuntamente el can se le aventó, pero no la atacó; el efectivo de Seguridad Pública, salió de la vivienda con una pistola en la mano y le dio tres balazos al “Chato”, cayendo muerto. El caso fue ventilado por los vecinos.

yc