La industria manufacturera es el sector económico que más aporta al Valor Agregado Bruto (VAB) de los productos poblanos, con 54.4 por ciento; mientras que el comercio aporta 26.3 por ciento; y los servicios, 19.3 por ciento.
El Valor Agregado Bruto (VAB) es el valor económico adicional que adquieren los bienes y servicios al ser transformados durante el proceso productivo. De acuerdo con los resultados definitivos de los Censos Económicos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), en los últimos cinco años el valor agregado registró un crecimiento de 5.9 por ciento anual en el país.
En Puebla se tienen registrados 405 mil 111 establecimientos; sin embargo, a pesar de que el mayor porcentaje, 48.2 por ciento, corresponden al sector comercio, los de manufactura que representan 16.8 por ciento, generan mayor valor agregado a los productos.
En cuanto el personal ocupado, en el sector manufacturero trabajan 26.8 por ciento de los empleados; en los servicios no financieros 33.9 por ciento; en el comercio, 33 por ciento; y en el resto de las actividades económicas, 6.3 por ciento.
Ante los resultados del Inegi, María Teresa Herrera Rendón, directora de la Facultad de Economía de la Universidad Popular Autónoma de Puebla (Upaep), explicó que el capital humano es fundamental para el crecimiento económico, el desarrollo sustentable de la industria y la generación del valor agregado en los productos.
Señaló que, en estados como Puebla, las industrias que se dedican a la manufactura, a través del uso de la eficiencia técnica, pueden mejorar sus resultados para enfrentar la crisis económica generada por la pandemia de covid-19.
“El capital humano es fundamental para que las empresas del sector de la manufactura alcancen sus metas e incidan en el crecimiento económico y desarrollo sustentable. La formación de capital humano de calidad y con una alta responsabilidad moral, el cual contribuye a utilizar mejor los recursos naturales y materias primas para lograr el crecimiento económico y desarrollo sustentable de las industrias”, señaló.
Ante la situación actual, la académica destacó que es fundamental detectar a las empresas y los sectores económicos eficientes y cuáles no lo están logrando para proponer soluciones tomando en cuenta los principios de crecimiento económico y el desarrollo sustentable.
“Si no utilizamos los recursos que se tienen de manera eficiente, si los derrochamos, como es el caso del agua o cualquier otro recurso natural, así como las materias primas que no son utilizadas de manera adecuada, van a provocar ineficiencia y derrochamiento de estos recursos, lo que en el futuro inmediato provocará efectos negativos para la economía de las empresas”, expresó.
Resaltó que la industria manufacturera requiere de capital humano capacitado; sin embargo, en muchas ocasiones, los trabajadores no siempre encuentran un puesto adecuado donde pueda desenvolverse profesionalmente.
“Muchas veces, el departamento de capital humano de las organizaciones desconoce cómo explotar mejor los perfiles de cada profesionista, por lo que, estos departamentos deben estar más capacitados para saber colocar y explotar mejor el talento y conocimiento de las personas, de acuerdo a su área de especialización”, apuntó.
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