Marciano Gómez, padre de familia de dos varones, llevó a su hijo menor Omar este lunes a la escuela pues dijo que ya era hora que regresaran a clases presenciales y no solo fue decisión de él y su esposa, sus hijos fueron quienes le pidieron volver a las aulas. "¡Papá, ya queremos regresar a la escuela!"
Pero al llegar a la primaria Sor Juana Inés de la Cruz, ubicada en avenida Fuentes de Satélite, colonia Santa Cruz del Monte, municipio de Naucalpan, los docentes no permitieron el paso a Omar, de 9 años, quien cursa el cuarto año, porque no llevaban copia de la carta compromiso para regreso a clases.
Así que su mamá fue de prisa a una papelería, pero tardaba y Omar aguardaba impaciente con su papá en la entrada de la escuela.
- ¿Papá si no llega mamá ya no me van a dejar entrar? Preguntó preocupado pero bien bañadito y peinado, con su mochila a la espalda.
- Sí llega hijo, no te preocupes.
El señor Marciano expresó su confianza que con las medidas sanitarias que se realizan en la escuela desde el filtro de ingreso, no habrá contagios, “además los niños ya tenían que ir a la escuela, tengo un niño en la secundaria y él también ya quería regresar a clases”, comentó a la reportera.
Además de que las clases van a ser escalonadas a Omar le tocó asistir lunes, miércoles y viernes, otros grupos acudirán martes y jueves de esta semana.
Tras minutos de incertidumbre -que para el pequeño Omar eran eternos- su mamá regresó con la copia de la carta responsiva y rápidamente firmó el señor Marciano y Omar pudo entrar por fin a clases.
¿Qué es la carta responsiva?
En la carta responsiva, los padres de familia se comprometen a no llevar a sus hijos a clases presenciales si presentan síntomas como estornudos, dolor de garganta y cabeza, pérdida de olfato, escurrimiento nasal y fiebre.
KVS