Marlon Martínez Martínez es un hombre originario del municipio de Jilotepc, Estado de México, y tuvo una infancia que fue especial por el oficio de comerciante que desde a muy temprana edad desempeñó.
Hijo de tortilleros, comprendió rápidamente cómo en la fila del local familiar se crearía comunidad, la cual fue ampliando con los recorridos que hacía diariamente con la venta de billetes de lotería.
Desde los diez años vendía boletos de lotería en mercados, cantinas, establecimientos, lo que se tradujo en conocer el primer cuadro de su municipio, desde allí empezó tener acercamiento con la gente hasta que a los 30 años fue alcalde, tras una serie de esfuerzos y dedicación.
Alcanzar los sueños, asegura, se basa en la disciplina y humildad, hacer día a día diferente siempre, alcanzado sus objetivos, pero con la sabiduría de que el trabajo se gana con los pies en el piso.
Amante de la barbacoa y de los platillos de la región del norte del estado, Marlon es agradecido con sus padres, quienes pudieron darle estudio a todos por la venta de tortillas, además, se siente agradecido porque tuvo la suerte del ser tercero de cinco hermanos, lo que le permitió crecer rodeado de las enseñanzas de los mayores, pero con el compromiso de guiar a los menores.
Recientemente fue nombrado coordinador de la bancada del Partido Revolucionario Institucional (PRI) en el congreso local y esta es parte de su historia.
¿Quién es Marlon Martínez, de dónde es?
Marlon Martínez Martínez es originario del municipio de Jilotepec. Me tocó crecer en la cabecera municipal de nuestro querido municipio, les puedo mencionar que llevé una niñez feliz. Mis padres son originarios de Chapa de Mota y Jilotepec y yo me desarrollo ahí, vivíamos frente al jardín principal frente a la cabecera.
Me siento muy orgulloso de mis orígenes, le agradezco mucho a mi padre, a mis hermanos que siempre hemos tenido una buena convivencia.
¿Cuántos hermanos tienes?
Somos 5 hermanos, los cinco pudimos crecer gracias a la venta de las tortillas, somos tortilleros. Es el negocio de mi señor padre, lo tuvo durante toda la vida muchísimos años y bueno, pues gracias a eso todos tuvimos oportunidad de tener escuela, por eso estoy muy agradecido. Nos tocó una época en la que los cinco estábamos en la universidad y nunca escuché a mi papá decir que no se puede, sino que siempre le puso ánimo y le puso energía y también eso hay que destacarlo.
¿Cómo fue ese gran paso?
También vendía billetes de lotería, entonces cuando voy a un restaurante y veo a alguna persona que se acerca a venderme un billete de lotería, yo me identifico porque lo hice muchos años y bueno, pues eso también me permitió conocer muchos lugares, porque yo desde tercero de primaria, cuarto, quinto y en la secundaría a lo mejor me metía a lugares donde normalmente los niños de mi edad no iban, eran otros tiempos.
Me metía a los comercios, llegaba al mercado, al tianguis a vender los billetes de lotería, a los restaurantes a las cantinas. Estoy hablando de 11 o 12 años, iba a vender, aunque no podíamos entrar menores de edad, me permitían, llegaba vendía mis billetes y me salía, y bueno, eso me permitió también conocer a mucha gente, porque también en las tortillas conoces a mucha gente.
¿Qué te animó a hacer política?
Me animó entrar a la política porque de muy joven me tocó ser líder de la Juventud Popular, que agrupaba Jóvenes Comerciantes que ya tuvieran algún negocio, entonces nos invitaron en el sector popular del PRI.
Cuando nos dicen vámonos a Toluca era un peregrinar muy fuerte, pero con el que iba ser el secretario general, Orlando, un amigo, le digo vámonos y agarramos una camioneta de las tortillas. Venimos a tomar protesta y te puedo decir que yo todavía no votaba cuando ya era priista, no tenía ni 18 años cuando ya formé parte de los jóvenes y después teniendo los 18 años siempre hemos sido priistas.
¿Qué sensación te dejó?
Cuando vendía billetes de lotería me daba grasa –en los zapatos- a fuera de la presidencia municipal que estaba cerca de mi casa y había una persona que se llamaba Don Nacho, de un lado traía mis billetes de lotería y del otro lado el periódico y desde chico dije “algún día voy a ser presidente municipal”, entonces siempre me enfoqué a ser presidente municipal y también tengo que ser muy agradecido con la vida y con Dios, porque la primera vez que busqué ser presidente, lo logré, no era tan joven, pero ya tenía 30 años.
¿Qué estudiaste Marlon?
Sí quería ser presidente municipal, pero también buscaba el tema de la empresa porque es parte, es la formación de la familia, de poder generar empleo y ahora través de los años puedo decir que me siento muy orgulloso de lo que hemos logrado
Siempre he creído que todos los puestos son pasajeros y la humildad engrandece, yo creo que esa es una frase vida que nunca debemos de olvidar porque cuando tú niegas tus orígenes, cuando tu niegas tus esfuerzos, tus logros, te estás negando a ti mismo. Creo que debemos de pensar que en el lugar en el que estemos lo primero es entregarnos al mil por ciento y hoy la política es día a día
¿Cuál ha sido tu sueño más grande?
Mi sueño es en el que estoy, es la política, me siendo bendecido porque hago lo que me gusta. Muchos dicen que la política es muy complicada, muy difícil, muy traicionera, todos los defectos que le puedan ver; y yo al contrario, le veo todas las virtudes, creo que la política de buena fe es buena, la que entrega resultados, la que busca el bienestar, la que satisface.
¿Cuáles son tus hobbies, cómo se siente pleno Marlon Martínez?
Anteriormente me gustaba mucho el futbol, practicaba mucho de cancha completa, futbol 7, ahora ya no lo hago, los años toman factura, pero me gusta hacer bicicleta, me gusta la bicicleta de montaña, me gusta la cuatrimoto y cuando se puede y me invitan a una cascarita tratamos de formar parte de eso.
KVS