La cultura prehispánica y la conquista española se mezclan en la infraestructura del ex convento franciscano de San Andrés Calpan, Puebla, y reflejan en cada uno de sus elementos la historia de la región. A través de un recorrido, MULTIMEDIOS Puebla apreció el recinto religioso, el cual recibe a miles de turistas que buscan conocer más sobre la cultura mexicana y su preservación.
En entrevista con MULTIMEDIOS Puebla, Francisco Damián, uno de los guías turísticos del recinto, explicó que dicho inmueble refleja una historia de al menos tres mil años, en los cuales se narra la historia de la demarcación. En este sentido, refirió que existen múltiples elementos que han generado una atracción hacia la ciudadanía, siendo un ejemplo de ellos los grabados presentes en las capillas que forman parte del convento.
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Esto se debe a que se encuentran representaciones que mezclan la cultura prehispánica y cómo se vivió la conquista española en la región, contemplándose personajes de la religión católica. A través de los detalles en las capillas, también es posible observar a deidades prehispánicas, las cuales se combinan con imágenes de Jesús, María y ángeles.
Destacó que esta situación convierte al ex convento de Calpan en un lugar único, ya que, a diferencia de otros inmuebles de este tipo, contiene una combinación de culturas.
“El convento tiene mucha historia que contar, contiene tanto grabados prehispánicos como católicos, es una tierra milenaria… lo que más les gusta a las personas que vienen son los grabados”, expresó.
Otro de los elementos que se destacan en el ex convento de Calpan es que, en la antigüedad, el patio trasero era utilizado para sembrar nogales, así como árboles de Castilla, siendo estos últimos una de las características culinarias de la región. Francisco Damián explicó que, gracias a esta situación, el municipio es conocido como la Cuna de la nuez de Castilla, lo que ha convertido a la demarcación en una de las principales exponentes del chile en nogada.
Martín López, originario de la Ciudad de México y quien visitó el templo religioso, destacó la importancia de difundir y preservar este tipo de inmuebles, ya que son una representación tangible de la historia del país. Tras visitar el ex convento, aseguró que tuvo una experiencia única, resultado de la infraestructura del lugar, sirviendo también para conocer más sobre los sitios históricos.
“Es bonito venir a verlos porque uno se lleva un poco de la historia; entonces, siempre hay que visitar estos lugares en cualquier parte; al final de cuentas, cada uno deja una experiencia inigualable”, expresó.
Cabe recordar que el lugar fue declarado Patrimonio Cultural de la Humanidad por parte de la Unesco en 1995, lo que aumenta la relevancia de visitar dicho inmueble en la entidad poblana.
AAC