El incendio en Valles de San Bernabé, mejor conocido como “El Pozo” en Monterrey, visibilizó un problema que tiene décadas en Nuevo León: el de asentamientos irregulares con pocas posibilidades de ser reubicados o legalizados. Esto involucra a unas 50 mil familias en todo el estado.
Al menos 154 predios están en la lista de espera para ser regularizados. Otros 358 están bajo investigación y de confirmarse que en ellos hay posesionarios, entrarían también en este estatus, reveló el director de Fomerrey, Eugenio Montiel Amoroso, en entrevista para Telediario.
Predios por regularizar
- 154 predios “oficiales”
- 358 por investigar
- 50 mil familias involucradas
Hace casi 20 años fue la última vez que se creó un nuevo fraccionamiento para reubicar a posesionarios, así que los 512 asentamientos en espera de certeza jurídica podrían tardar aún más. El Gobierno del Estado queda rebasado al no contar con terrenos para otorgar una posibilidad a las personas en dicha situación.
Y el problema se agrava con la llegada de miles de migrantes de otros países y de otros estados de la República Mexicana.
En el caso de los habitantes de Valle de San Bernabé, el funcionario explicó que están evaluando las condiciones legales y seguridad de la zona para darles una solución a las familias afectadas.
Montiel Amoroso recalcó que los siniestros en este tipo de asentamientos irregulares son frecuentes debido a los riesgos que tienen las zonas donde instalan las familias que en muchas ocasiones regresan de forma ilegal por la falta de espacios nuevos y demoras en los trámites.