Tras la muerte de dos menores tamaulipecos por pisar un cable de alta tensión de la Comisión Federal de Electricidad, se planteó en la Cámara de Diputados la necesidad de llamar a la empresa productiva del estado a realizar inspecciones a la red eléctrica, principalmente la que se encuentra en los alrededores de las escuelas y deslindar responsabilidad penal por actos de negligencia.
En un punto de acuerdo promovido por Juliana Elizondo se plantea exhortar a la CFE para que lleve a cabo una inspección minuciosa que permita garantizar la seguridad de los usuarios y que haya un acercamiento con las familias de los deudos o personas lesionadas por accidentes con la red eléctrica nacional y darles la ayuda necesaria, y en su caso, la indemnización de ley.
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Cada año, cerca de 13 mil personas son víctimas de quemaduras por electrocución, y de ellos, entre 5 y 8% son niñas y niños, de acuerdo con datos proporcionados por el presidente del Consejo Consultivo de la Federación de Colegios de Ingenieros, Mecánicos, Electricistas y Electrónicos de Ramas Afines de la República Mexicana, Jorge Higinio García.
Así lo expone la diputada Olga Elizondo, al señalar que según estimaciones, cada año mueren por esta causa alrededor de 560 personas y lamentablemente fue el caso de Sergio, un joven de apenas 16 años de edad, quien el pasado 5 de septiembre, al salir de su escuela y dirigirse a su domicilio en Reynosa, perdió la vida tras tocar un cable de alta tensión, propiedad de la CFE, por el que corrían 7 mil voltios de energía.
Sus compañeros de clase, amigos y familiares lo describen como un estudiante dedicado, alegre, amante de los videojuegos y con un futuro prometedor como chef; sin embargo, murió debido a una negligencia que, incluso había sido reportada por autoridades del mismo plantel en reiteradas ocasiones.
“Desafortunadamente, el escenario se volvió a repetir en Matamoros, el pasado lunes 19 de septiembre de 2022, cuando el pequeño Fernando de tan solo 7 años de edad, perdió la vida cuando iba rumbo a la escuela en su bicicleta tras hacer contacto con un cable propiedad de la empresa productiva del Estado, la CFE. La madre del niño, Cristina del Ángel, también salió lesionada en su intento por salvar a su hijo”.
Mencionó que es inadmisible que se pierda la vida por omisiones para las que existe una prevención segura y eficaz. "La seguridad es un derecho de los usuarios y es una obligación de las autoridades cumplir y hacer cumplir las Normas Oficiales Mexicanas en materia de seguridad, situación que permite no sólo proteger a los trabajadores, sino también al entorno que rodea las instalaciones, con el propósito de reducir los riesgos de accidentes”.
Dijo que es evidente que en los casos mencionados no se estaba cumpliendo con la Norma Oficial Mexicana NOM-001-SEDE-2012, misma que establece la altura y distancia mínima en la que deberá estar un cable de electricidad, por lo que es obligación de la empresa productiva del Estado rectificar y realizar una inspección minuciosa a fin de evitar nuevas tragedias.
“Si bien es cierto que ninguna reparación económica restituirá la vida de los niños y adolescentes fallecidos o que actualmente sufren lesiones graves, es fundamental que la CFE asuma su debida responsabilidad en cada uno de los casos, indemnizando a sus familias y otorgando el apoyo necesario”, apunta.
CGCH