¿Cuál es la multa por tirar basura en la calle en CdMx?

Seguramente te has topado más de una vez en la Ciudad de México con gente que, sin ninguna preocupación mientras va caminando en la calle, deja caer algún papel, un envase, una envoltura y cuando otra persona le pide que la recoja, se pone a la defensiva y hasta se torna agresivo. O muy probablemente ya tienes ubicado en tus rutas cotidianas más de un punto donde la gente acude a tirar su basura regularmente, aunque no haya contenedores.

Un estudio publicado en la revista El Residente, del Instituto Científico Pfizer, mostró que los altos niveles de contaminación provocados por residuos tangibles o intangibles en la Ciudad de México afectaron negativamente la capacidad olfativa de sus habitantes, comparados con los habitantes de otros estados menos contaminados. Esto quiere decir que un ciudadano promedio es menos hábil, por ejemplo, para identificar que un alimento ya empezó a descomponerse basado únicamente en el olor.

​La Ciudad de México, ocupando menos del uno por ciento del territorio nacional, genera el 30 por ciento de la basura de todo el país, señaló un artículo de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM). Estimaciones de la UNAM sugieren que cada mexicano produce cerca de un kilogramo de basura diaria, lo que se traduce en más de 120 mil toneladas generadas sólo en la ciudad.

No cabe duda que el manejo irresponsable de la basura es un problema que termina afectando a toda la ciudadanía, pues con ella se incrementan las enfermedades como el tifus, la fiebre tifoidea, la peste, la salmonelosis, la cólera, la disentería, la malaria, entre muchas otras.

Sabiendo todo esto, ¿te has preguntado si puedes denunciar a quien tira basura en la calle? O si tú sueles arrojar desechos en la calle, a qué penas podrías ser acreedor. En entrevista con MILENIO, el Doctor en Derecho, Virgilio Tanús, especialista en materia penal y socio director del despacho Tanús, Salazar & Azaola, nos habló acerca de este tema.

¿Cuál es la ley que prohíbe tirar basura en la calle?

Son varias las leyes y códigos que hablan acerca de esta conducta. La Ley de Cultura Cívica de la Ciudad de México estipula en su artículo 29 que es una infracción contra el entorno urbano de la Ciudad el tirar basura en lugares no autorizados, así como “arrojar, tirar o abandonar” en el espacio público animales muertos, desechos, objetos, sustancias peligrosas para la salud o que despidan olores desagradables.

La Ley de Residuos Sólidos del Distrito Federal establece en su artículo 25 que queda prohibido “arrojar o abandonar en la vía pública, áreas comunes, parques, barrancas, y en general en sitios no autorizados, residuos sólidos de cualquier especie”. También es clara al especificar que quedará prohibido, por ejemplo, en lotes baldíos, a cielo abierto, en cuerpos de agua, en sistemas de drenaje, fuentes, o incluso, instalar contenedores en lugares no autorizados, así como fomentar o crear basureros clandestinos.

Por su parte, la Ley General para la Prevención y Gestión Integral de los Residuos dice en su artículo 100 que estará prohibido “verter residuos en la vía pública, predios baldíos, barrancas, cañadas, ductos de drenaje y alcantarillado […] en cuerpos de agua, cavidades subterráneas, áreas naturales protegidas […] zonas rurales” y, en general, en lugares no autorizados.

Además de estos, algunos otros documentos se han ocupado de esta prohibición, como lo son la Ley Ambiental de Protección a la Tierra en el Distrito Federal y el propio Código Penal.

El Doctor Tanús declaró que “tirar una basura en un lugar prohibido formalmente no implica la comisión de un hecho delictivo” sino que se trata de una “infracción administrativa” desde la perspectiva de la Ley de Cultura Cívica. La cual puede castigarse desde con una amonestación, una multa, trabajo comunitario y/o hasta con el arresto (el máximo de 36 horas), todo lo cual se detalla en los artículos 30 y 31.

Las multas se dividen en tres clasificaciones de acuerdo con su gravedad y se medirán en Unidades de Medida y Actualización cuyo pago será de 103.74 hasta tres mil 734 pesos.

No obstante, señaló, el Código Penal para el Distrito Federal sí establece en su artículo 346 que se le impondrán de dos a seis años de prisión y de mil a cinco mil días multa “a quien vierta aguas residuales, residuos sólidos o industriales […] y se ocasionen daños a la salud de las personas o uno o más ecosistemas o sus elementos”. 

Un día multa “equivale a la percepción neta diaria del inculpado en el momento de cometer el delito”, lo que quiere decir que si la persona gana el salario mínimo, la multa sería de entre 207 mil 440 pesos hasta un millón 37 mil 200.

¿Dónde denunciar si alguien tira la basura en la calle en CdMx?

El Doctor Virgilio expresó que cualquier persona puede presentar una queja ante el juez cívico o reportarlo a la policía, o incluso acudir directamente ante la propia Secretaría de Medio Ambiente de la Ciudad de México (Sedema), mediante la figura de una “denuncia ambiental”, pues “parte de las funciones de la Secretaría de Medio Ambiente es velar porque no se genere ese daño ambiental”.

En última instancia, también se puede acudir ante la fiscalía. La queja puede ser oral o por escrito, o bien, vía correo electrónico ante cualquiera de estas tres autoridades. Con lo que, aseguró, es bastante accesible para la ciudadanía que pueda presentar sus denuncias, y a final de cuentas, no es necesario para la ciudadanía que sepa si “se trata sólo de una infracción o de un hecho delictivo [basta] con que hagan del conocimiento de la autoridad el hecho, quien remitirá a la instancia correcta. Lo importante no es que se presente ante la autoridad correcta, sino que simplemente se presente, denunciar”.

Aunque formalmente no existe una persona encargada específicamente en velar por que no se tire basura en la calle, destacó el especialista, el policía tiene la capacidad de reportar el hecho, así como la propia ciudadanía en el momento en que sea testigo de que se esté cometiendo esta falta. Lo deseable es que “el ciudadano lo haga del conocimiento a la policía, quien es la autoridad normalmente más próxima, y que efectivamente puede proceder a presentar al acusado ante el juez cívico con base en esa queja ciudadana”.

También sostuvo, que incluso sin la intervención de la policía, el propio ciudadano puede acudir directamente ante la Sedema o ante el juez cívico, únicamente se necesitaría identificar a la persona. 

“Si yo tengo el nombre y conozco a la persona, aunque no se puede presentar en ese momento, se le puede mandar una queja que proceda”, explicó el abogado.

Ha habido quejas, relató, en las que se ha identificado que de algún vehículo se aventaron los desechos; en esos casos se pueden dar los datos del vehículo, día, lugar, hora y placa. “Con las simples fotografías que uno tome, a veces es suficiente para darle trámite a esas quejas. La intención es hacerlo mucho más accesible a cualquier ciudadano”.

Botes de basura en mi alcaldía 

Cuando existen lugares que se han identificado que se usan como tiraderos, efectivamente, lo adecuado sería poderlo adaptar con contenedores para poder manejar eficazmente los residuos, precisó el especialista. Lo que debería implicar también todo un tema de logística, como las rutas, el personal, etc.

“La verdad es que si la Sedema ya tiene identificados ciertos lugares, que aunque no lo sean, la gente identificó como tiraderos creo que es mucho más fácil poner en esos lugares contenedores y que la gente siga tirando la basura. No es malo que la gente tire la basura, lo malo es que no lo tire en el lugar correcto y de la manera correcta”.

Es perfectamente válido también denunciar estos tiraderos, confirmó. Uno debe documentarlos y acudir ante la Sedema. La institución evaluaría la viabilidad del espacio. “Si es un espacio público, la Sedema podría poner ahí los contenedores, sería lo adecuado. Válidamente la ciudadanía es lo que tiene que hacer, notificarlo a la secretaría”.

Sobre todo tomando en cuenta que el artículo 10 de la Ley de Residuos Sólidos del Distrito Federal expresa que corresponde a las alcaldías “instalar el equipamiento para el depósito separado y selectivo de los residuos sólidos en áreas públicas, áreas comunes y espacios públicos, así como en lugares donde técnicamente se determine viable o necesario la instalación de los mismos y garantizar periódicamente su buen estado y funcionamiento”.

Ante este tema, el especialista comentó la diferencia del acto que es el tirar basura en la calle y otra clase de conductas. Los “delitos de resultado” son aquellos donde queda muy patente la consecuencia que el acto trae consigo, “si yo disparo un arma de fuego y mato a alguien, en ese momento se verifica la muerte”. Pero cuando alguien tira un vaso de plástico a la vía pública, es difícil argumentar que esa conducta resulte en una consecuencia tangible e inmediata.

“Eso no quiere decir que no se pueda producir eventualmente un daño. Para el Derecho penal ha sido un reto tratar de prevenir ese tipo de comportamientos y se ha ido adentrando en lo que ahora se llaman ‘delitos de peligro’. Son delitos que en el momento mismo de la conducta no se produce un resultado material pero sí se está poniendo en peligro el bien jurídico que se trata de proteger”.

De aquí nacen los llamados “delitos de peligro abstracto”, como sería el caso de tirar basura en la calle. Y así, las personas de manera individual, con su conducta, pueden ir sumando a los “daños acumulativos” que terminan siendo los residuos de la ciudad.

¿Qué se puede hacer para reducir la basura? Programas de manejo de residuos

En cuanto a las acciones más recientes llevadas a cabo por el gobierno para el mejor manejo de los residuos citadinos, el Doctor Tanús retomó la Ley General para la Prevención Integral de los Residuos, la cual, dijo, tiene por objeto garantizar el derecho que toda persona tiene a un medio ambiente sano y propiciar ese desarrollo sustentable. 

Básicamente a través de la prevención de la generación de residuos, la valorización y la gestión integral de estos residuos. Lo que pretende es justamente prevenir la contaminación de determinados lugares o llevar a cabo su remediación.

Otro con el que se cuenta es el Plan de Acción Basura Cero, hacia una Economía Circular, presentado por el gobierno de la Ciudad de México apenas en mayo del 2019.

“Consiste en la implementación de mecanismos orientados a reducir la cantidad de residuos que llegan a los rellenos sanitarios. Se pretende hacerlo mediante la promoción de una cultura social enfocada a la separación de residuos y la correcta disposición de estaciones de transferencia, aumentar los residuos que —por sus características— puedan revalorizarse y retornar a las cadenas de producción”.

Finalmente habló del Programa de Gestión Integral de Residuos y del Reciclatrón. El primero es un programa concebido con una temporalidad del 2021 al 2025, que aportaría a las metas y acciones a seguir para la prevención, el aprovechamiento y el adecuado manejo de los residuos. Por su parte, el segundo promueve entre la ciudadanía el correcto manejo, separación y reciclaje de los residuos.

Para el Doctor Virgilio, si algún elemento hace falta en esta labor, sin duda alguna es la difusión: “Yo sí creo que hace falta darle mucha difusión [...] Por ejemplo, en la Ciudad de México generamos más de 13 mil toneladas diarias. Y sobre todo que la población entienda los beneficios de hacerlo y los riesgos para la salud de todos nosotros de no hacerlo”.

El abogado expresó que hace falta generar una cultura del reciclaje, pues “cuando la gente no tiene interiorizado en su educación o valores ciertos temas, es complejo para el Estado prevenir esas conductas”. 

“Ahí sí, la ley juega un papel muy importante y aunque tú no tengas este valor interiorizado, pues yo te aviso que si cometes estas conductas te voy a tener que imponer tales sanciones. A veces la ley sí suple esos huecos que culturalmente no se tienen […] Necesitas una ley sumamente clara, con una gran difusión y que cuando la gente cometa esa infracción, la ley tenga los mecanismo adecuados para efectivamente sancionar […] Obviamente el camino ideal es la política social. No tener que recurrir a leyes que sancionan para que la gente haga lo que debería de hacer en pro del medio ambiente. Es todo un tema integral”, finalizó.

ABR