Con más de 3 mil piezas en exhibición, el Museo José Luis Bello y González es uno de los mejores a nivel nacional en cuanto a colecciones de arte, además, de medirse con museos internacionales; y es que este 21 de julio celebra 80 años de su fundación, entre las obras más icónicos con las que cuenta es un piano inglés del Siglo XIX, el Pabellón Flotante completamente labrado en marfil, entre otros.
Para conocer la historia del museo es necesario remontarnos a 1822, con el nacimiento de José Luis Bello y González, quien desde muy joven dejó su natal Veracruz para asentarse en Puebla, en donde tuvo descendencia e inició a coleccionar arte.
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Sin embargo, fue hasta 1907 con la muerte de José Luis Bello y González que su hijo menor Mariano Bello, quien también era amante del coleccionismo arte, adquirió una casona ubicada en el Centro Histórico de Puebla y la adecuó con diferentes estilos de arte.
Mariano Bello recopiló más de 3 mil piezas que empezó a coleccionar su padre para la exhibición; entre ellas, se encuentran pinturas, esculturas, grabados, marfiles, entre otros tesoros que, con el paso del tiempo se han convertido en patrimonio histórico, artístico y cultural de los poblanos.
No obstante, fue hasta el 21 de julio de 1944 que aperturó el museo, pues el gobierno del estado compró la casa en donde vivió Mariano Bello y se logró la donación de todas las piezas de arte.
Entre las obras más destacadas que se encuentran en este lugar son el Pabellón Flotante, una espectacular embarcación hecha de marfil, se trata de un barco con más de 20 personajes individuales.
Asimismo, dentro del inmueble se encuentra un piano inglés del siglo XIX que se denomina “Eufonicón”, de estos ejemplares hay muy pocos en el mundo, incluso solo se tiene registro de la existencia de otro en el “Metropolitan Museum of Art”, de Nueva York, en el Castillo de Chapultepec y, por supuesto, en el Museo Bello en la capital poblana.
En este recinto se encuentra el plano más antiguo de la Ciudad de Manila en Filipinas, un ejemplar único de la cartografía a nivel mundial que también denota la buena relación que había entre América y Asia en el siglo XVII.
El Museo Bello también alberga pinturas, en este rubro su pieza más icónica es la Virgen Apocalíptica que hizo Cristóbal de Villalpando en el siglo XVII, que estará expuesta en el marco del 80 aniversario.
Por su parte, el artista Miguel Zurita realizó en el patio central una reinterpretación de esta obra con aserrín pintado, todo realizado a mano y el público que asista a este festejo podrá admirar.
A decir del propio artista, es un orgullo haber sido elegido para realizar tan importante reinterpretación y mencionó que realizar esta obra tiene un contexto prehispánico cristiano, pues ellos lo hacían cada que festejaban algo.
En cuanto a las actividades para celebrar los 80 años de este museo, los visitantes podrán encontrar un museo vivo, toda vez que diferentes artistas fueron invitados a participar en la reinterpretación de obras, entonces cuando los visitantes van pueden percibir el olor de los materiales y ver cómo es que realizan su trabajo, claro que con todas las medidas y protocolos adecuados.
Las actividades que se realizarán en el Museo Bello conmemorando las ocho décadas de su existencia van desde conferencias impartidas por el maestro Enrique Mauleón sobre los instrumentos musicales.
Mientras que el domingo, el maestro Edward Charles Pepe dará un concierto en el órgano tubular que se encuentra en el propio recinto, esto entre otras actividades planeadas.
AAC