El gobierno de los Estados Unidos está contemplando la posibilidad de alojar a niños migrantes en una base de la Guardia Nacional en California. Esto después de que el Pentágono aprobara este viernes el uso del centro Camp Roberts para el alojamiento temporal de niños migrantes no acompañados por un adulto, indicó una fuente militar.
No queda claro aún si se llegará a usar esa base, ubicada a orillas del Río Salinas entre Los Ángeles y San Francisco ni cuántos niños irían allí de ser el caso. El Departamento de Salud y Servicios Humanos afirmó hoy sábado que el campamento está “bajo activa consideración”, pero que no se ha tomado una decisión definitiva.
“Cuando el departamento decida activar unas instalaciones como albergue de emergencia para niños migrantes no acompañados, notificaremos a las autoridades locales y estatales y a los congresistas”, expresó ese despacho en un comunicado
El departamento sí ha pedido el uso de la base, confirmó el jueves John Kirby, vocero del Pentágono. La Guardia Nacional de California no respondió de inmediato a un pedido de comentario.
Las autoridades fronterizas encontraron más de 9 mil niños migrantes no acompañados en febrero, la cifra más alta para un solo mes desde mayo del 2019, cuando más de 11 mil menores fueron detectados en la frontera.
Tras ser procesados por la Patrulla Fronteriza, los niños son remitidos al Departamento de Salud y Servicios Humanos. Usualmente son entregados a un custodio, ya sea un padre o un familiar cercano.
A diferencia de los adultos, a los menores se les permite quedarse en Estados Unidos cuando llegan al territorio. Esa práctica ha llevado a muchas familias centroamericanas a enviar a los niños solos, o a llegar cerca de la frontera y soltar allí a los menores. La mayoría terminan temporalmente en albergues que actualmente están totalmente ocupados.
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