La crisis sanitaria ha ocasionado afectaciones económicas y pérdida de empleos en Tamaulipas, y ha orillado a los payasos a desistir en su objetivo de generar las risas de los niños, al buscar el sustento de sus familias en otras actividades.
Jesús Julián Corpus Ramírez “Jaibito”, líder de Payasos Unidos del Sur de Tamaulipas, indicó que “cuando menos 200 payasos se dedican a otra cosa (de los 450 que existen en la zona)” porque en medio de la pandemia fue imposible trabajar.
“Algunos tomaron la decisión de un trabajo fijo, que tampoco lo hay, mientras otros se dedican al taxi, han tenido que hacer otras labores como la carpintería, albañilería, ahora sí que moverse en lo que se pueda”, declaró.
El empleo en Tampico, Ciudad Madero y Altamira fue a partir del 15 de marzo que terminó el empleo casi por ocho meses, porque tienen apenas tres semanas que se reactivaron formalmente al abrir un poco las restricciones.
Durante este tiempo, indicó el líder de la citada agrupación, han ideado algunas estrategias enfocadas a beneficiarse mediante colectas de víveres y alimentos, con la ayuda de empresarios de la localidad.
Se han llevado a cabo un par de colectas con la ayuda de la tienda de descuentos Arteli, la cual les permitió recibir donación directa de los clientes a los payasos distribuidos en diversas sucursales.
Al no haber eventos, hacen espectáculo en las calles
La falta de eventos ha llevado a los hombres de maquillaje en el rostro y nariz roja hacia los espectáculos urbanos, en los que no hay gente amontonada y no ponen en riesgo a los menores de edad.
En un crucero de la avenida Monterrey todos los días sale a trabajar Juan Enrique Reyes Hernández, mejor conocido como “Danzarín”, quien ante la crisis sanitaria ha decidido perfeccionar sus habilidades y brindarse en la vía pública.
“A mí no me gustaba trabajar en los cruceros pero debido a la pandemia tuvimos que salir porque realmente ha sido muy difícil”, expuso el generador de risas, quien insiste se mantiene en un periodo de evolución.
El espectáculo en un evento tal vez dura 30 minutos, 20 o 15 minutos, en un autobús te llevas de 10 a 5 minutos; sin embargo, “estar en la calle ha representado reducir el tiempo de trabajo a una rutina de 40 segundos, por eso ha sido un reto”.
Asimismo, los bromistas personajes han tenido que buscar otra clase de empleo, como el animar las ventas en los negocios en las colonias como las tiendas, carnicerías y tortillerías.
Hay quienes tienen la posibilidad de trabajar en tiendas de zonas más céntricas y acceden a hacer dichas acciones, acompañados de una bocina y un micrófono, o hasta desempeñando la globoflexia.
Esperan una tercer colecta
La necesidad no ha terminado y la pandemia tampoco, así que Payasos Unidos del Sur de Tamaulipas espera llevar a cabo su tercer colecta durante este periodo, la cual busca beneficiar a las familias de los payasos locales.
Se busca sumar no solamente a los responsables de las tiendas departamentales, sino a los empresarios de la zona sur y a la ciudadanía en general, a que apoyen ya sea en especie o en efectivo.