Son héroes y parte fundamental del equipo.
Han salvado vidas, pisado los peores escenarios y su labor es titánica.
Nos referimos a los perros de rescate, que en Protección Civil de Santa Catarina han desempeñado un gran papel en las tareas que se les asignan.
Su entrenamiento comienza desde cachorros y para ello, el manejador selecciona al que considera idóneo dentro de la camada con base a ciertas características.
“Primeramente que no tenga miedo, que pueda estar expuesto a ruidos porque en una situación de desastre va a ver gritos, sirenas, ambulancias, entonces si la mascota se estresa o tiene miedo el trabajo va a terminar y la mascota va a dejar de buscar porque la mascota va a tener miedo”, dijo un elemento de Protección Civil.
Delta, es una Pastor Belga Malinoiss de 2 años, que está preparada para la búsqueda de personas en situaciones de desastre como en los sismos de la Ciudad de México.
Gilberto Almaguer, director de la corporación, explicó que los binomios caninos han sido testigos de acontecimientos históricos en el estado y en el país.
Su adiestramiento es 1 o 2 veces por semana en campo abierto y en estructuras colapsadas. Son capaces de olfatear a grandes distancias y pocas veces su instinto falla.
Los perros pueden aprender una orden en cuestión de semanas pero lo más importante es el vínculo con su manejador, ya que de eso depende que el canino desempeñe la función de rastreo, que en muchas ocasiones ha evitado tragedias.