Ante los remanentes de lluvias que se prevén para Hidalgo este domingo por la noche y la madrugada del lunes por el huracán “Beryl”, el subsecretario de Protección Civil y Gestión de Riesgos, Francisco Quijas Cruz, hizo un llamado a la población a extremar precauciones, principalmente, dijo, en la región de la Sierra.
“Que extremen precauciones, primero por las precipitaciones y luego por el viento, también el viento nos puede provocar algún problema, que estén atentos a cualquier situación generada por escombros o movimientos de árboles derrumbándose o peñascos que pueden caer sobre las viviendas o en las carreteras”, advirtió.
Invitó a las personas que si se presentan lluvias fuertes o crecidas de ríos o vientos, se dirijan inmediatamente a los refugios temporales, “son zonas seguras establecidas por las autoridades municipales, en caso de peligro inminente que desalojen en área inmediatamente y no tratar de salvar pertenencias”.
La Ley de Protección Civil precisa que un refugio temporal es un lugar físico destinado a prestar asilo, amparo, alojamiento y resguardo a personas ante la amenaza u ocurrencia de un fenómeno destructivo.
En tanto, la Ley Orgánica Municipal puntualiza que entre las facultades y obligaciones del titular de Protección Civil están el apoyar en los centros de acopio, en los refugios temporales y en los albergues, destinados para recibir y brindar ayuda a la población afectada en el desastre.
“Que las personas extremen precauciones al transitar por brechas, por caminos rurales ante la baja visibilidad de los terrenos donde se pueden presentar posibles deslaves, principalmente en la Sierra o algunas bajadas de agua con materia de arrastre”, agregó Francisco Quijas.
Invitó a las personas a que no intenten cruzar los ríos y arroyos y zonas bajas ante una creciente de agua pues advirtió que pueden ser arrastrados por el agua, “si hay algún riesgo de deslave o rodamiento de piedras deben desalojar sus viviendas”.
La Ley de Protección Civil establece que en caso de riesgo inminente, sin perjuicio de la omisión de una declaratoria de emergencia o desastre natural y de lo que establezcan otras disposiciones legales, las dependencias de la administración pública estatal y municipal, ejecutarán las medidas de seguridad que les competan.
Esto con el fin de proteger la vida de la población y sus bienes, la planta productiva y su entorno, para garantizar el funcionamiento de los servicios esenciales de la comunidad, informando de inmediato a las autoridades de protección civil correspondientes sobre las acciones emprendidas, quienes instalarán en los casos que se considere necesario y conforme a la normatividad aplicable el comité de emergencias, como centro de mando y de coordinación de las acciones en el lugar.