Los representantes legales de algunos reclusos en California, extendieron una petición al gobernador del estado, Gavin Newsom y al juez de distrito de los Estados Unidos, Jon Tigar donde se solicita la vacunación rápida dentro de las instituciones, empezando por los reclusos más vulnerables y así, disminuir la demanda hospitalaria donde se atiende las complicaciones por Covid-19.
Actualmente, los internos en prisiones pertenecen a la fase de vacunación ¨1B¨ (nivel 2).
Más de 4,000 de 95,000 reclusos cuentan con resultado positivo en pruebas de SARS-CoV-2. Solo en la prisión para hombres de Costa Central, 1 de cada 3 convictos se encuentran infectados, además de la institución para mujeres más grande del estado, donde se reporta 1 caso activo por cada 10 internas.
El abogado perteneciente a la Oficina de Derecho de Prisiones sin fines de lucro a cargo de una demanda colectiva por condiciones médicas dentro de las prisiones, Steve Fama, compartió que a pesar de lo duros que fueron los primeros 9 meses de la pandemia, el incremento de casos por Covid-19 durante los últimos 30 días han superado todas las complicaciones anteriores.
El personal a cargo de las instituciones penitenciaras comentó que el pico máximo de la pandemia dentro de las instalaciones se alcanzó el 20 de diciembre con un total de 10,721 casos activos en todo el sistema.
Autoridades iniciaron la vacunación de reclusos previo a la víspera de navidad en unidades de vivienda y centros médicos. Hombres y mujeres.
2,954 reclusos calificaron para recibir la vacuna contra Covid-19 en ese entonces, solo el 10% rechazó su administración.
En esta semana, funcionarios empezaron la vacunación a los empleados en las 35 cárceles estatales, estos empleados pertenecen a la fase ¨1A¨, con casi 19,000 trabajadores. Más de 2,600 empleados se encuentran infectados en todo el estado y 16 han muerto.