El estado de Guanajuato cuenta con 57 Plantas Tratadoras de aguas residuales con una capacidad instalada de 7 mil 500 millones de pesos para sanear el vital líquido, de las cuales por lo menos un tercio operan en condiciones de insuficiencia.
De acuerdo a la Comisión Estatal del Agua, son 18 las plantas que se encuentran en foco rojo; en Abasolo, Apaseo el Grande, Apaseo el Alto, Coroneo, la planta Insurgentes de Cortazar, Doctor Mora, Huanímaro, Romita, Salvatierra, San Diego de la Unión, San Luis de la Paz, Santa Catarina, Santiago Maravatío, Tarimoro, Tierra Blanca, Victoria, Yuriria y la ubicada en Salida a Pueblo Nuevo del municipio de Irapuato.
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Se ha detectado que por falta de recurso o mala aplicación de los mismos, las plantas tratadoras del estado operan al menos de la mitad de su capacidad de saneamiento, situación que urge corregir pues pese a que se tiene una capacidad instalada para sanear el 95.74% del agua del estado, en la práctica solo es tratada el 49.35% del agua.
"En este momento tenemos una inversión de 7 mil 500 millones de pesos de capacidad instalada que no está operando en casi un 50%, porque no hay recursos para que puedan operar de manera adecuada o porque los recursos no se están destinando al tratamiento de las aguas, no obstante que se está cobrando un recibo”, explicó Francisco García León titular de Comisión Estatal del Agua.
Operan en estado de suficiencia 13 plantas tratadoras ubicadas en; Acambaro, Celaya, Gunajuato, la planta 10 de Mayo Ubicada en Irapuato, Juventino Rosas, Manuel Doblado, Penjamo, San José Iturbide, Silao, Valle de Santiago y dos ubicadas en Dolores Hidalgo; Cruz del Padre y Ex Estación
Finalmente son 23 plantas tratadoras de aguas residuales las que operan bajo las condiciones óptimas, 11 de ellas están ubicadas en la ciudad de León, mientras que el resto se encuentran en Atarjea, la planta municipal de Celaya, la planta 'Dren Merino' ubicada en Cortázar, planta San Pablo en Dolores Hidalgo, Jerécuaro, Planta Moroleón-Uriangato, Ocampo, Salamanca, San Felipe, San Francisco-Purísima, San Miguel de Allende y Tarandacuao.
Solo faltan 4 de 46 municipios del estado por contar con sus plantas tratadoras de agua en sus cabeceras municipales; Pueblo Nuevo, Villagrán, Jaral del Progreso y Comonfort.