El uso del coche facilita la vida al tener trasladarnos con comodidad de un sitio a otro, sin embargo, el incremento de vehículos aumenta de forma significativa la huella de carbono, lo que ocasiona daños irreparables a la capa de ozono.
Por ello, cada 22 de septiembre se conmemora el Día Mundial Sin Automóvil, el cual tiene su origen en 1973, cuando varios países de Europa vieron limitadas sus reservas de petróleo y combustible y se encontraron en la necesidad de buscar alternativas para desplazarse. El primer país en aplicarlo fue Gran Bretaña en 1997.
En el año 2000 se constituyó como una iniciativa por la Comisión Europea y en ese mismo año se tomó como día mundial. En México empezó a celebrarse de manera formal en 2014 en la capital del país.
Durante este día se busca concientizar sobre el verdadero uso de este medio de transporte, por lo que se hace un llamado a los ciudadanos a dejar este medio por un día y probar nuevas formas y mecanismos de desplazamiento, como la bicicleta, el transporte público o vehículos eléctricos.
Por otra parte, el uso continuo de vehículos implica un gasto fijo que afecta el ingreso familiar: gasolina, parking, mantenimiento preventivo y correctivo, pago de seguro e impuestos.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) señala que más de 310 mil personas morían a causa de la exposición constante a los contaminantes del tráfico en las grandes ciudades. Por lo tanto, el incentivo del uso de otros medios de transporte es una urgencia que deben analizar todos los gobiernos, además de propiciar las condiciones básicas para que los ciudadanos puedan avanzar en ellas.
Por ello, la conmemoración busca transmitir el mensaje de no aceptar que la sociedad esté limitada al uso del coche y generar conciencia sobre la gran dependencia a los combustibles fósiles, mismos que perjudican la salud.
- Información de Abigail García
mpl